Prevén regreso de militares a sus cuarteles en 2014
La primera generación de agentes estará integrada por
una fuerza de 10 mil elementos; repliegue federal no incluirá a la
Policía Federal
El plan del Gobierno Federal para combatir la inseguridad
prevé el repliegue gradual de las fuerzas convencionales del Ejército y
la Marina que participan en los operativos de seguridad pública el
próximo año. Serán sustituidos por la Gendarmería Nacional que
arrancaría con 10 mil elementos con formación castrense.
Autoridades del gobierno federal indicaron a 24 HORAS que este repliegue no incluiría a la Policía Federal, pues se mantendrá trabajando de forma coordinada con la Gendarmería y las autoridades estatales y municipales en los puntos de mayor violencia del país.
El plan, indicaron fuentes de la Comisión Nacional de Seguridad (CNS), dependerá de que la Gendarmería se encuentre en pleno funcionamiento a finales de este año, así como de los resultados de la evaluación que realice el Gobierno federal sobre la incidencia delictiva en diciembre.
Según las mismas fuentes, los hechos de violencia que se han registrado en los primeros tres meses de gobierno en regiones del país con presencia del crimen organizado, como Coahuila, Michoacán y Tamaulipas, imposibilitan que el trabajo de seguridad pública vuelva a recaer exclusivamente en las fuerzas locales en el corto plazo.
El miércoles, el subsecretario de Normatividad de Medios de la Secretaría de Gobernación, Eduardo Sánchez, negó que la violencia se debiera a un repliegue prematuro de las autoridades federales y, subrayó, que continuarían en el terreno el resto del año.
En este contexto, el plan de gobierno prevé para 2014 una “desmilitarización” en las calles, de las fuerzas convencionales del Ejército y la Armada. En su lugar se introducirá a los efectivos de la Gendarmería Nacional -que también serán militares- para trabajar de forma coordinada con la policía federal y las fuerzas locales.
Se trata, además, de que la Secretaría de Gobernación, que tiene bajo su jurisdicción a la Policía Federal y a la eventual Gendarmería, tenga la responsabilidad completa de la coordinación con los estados, lo que permitirá que las Secretarías de la Defensa Nacional y de Marina se enfoquen a sus tareas regulares de protección de la soberanía nacional, sin que ello excluya su involucramiento en operativos especiales.
Gendarmería castrense y policial
Aunque la Gendarmería Nacional estará integrada en un inicio por 10 mil elementos, que en su mayoría provendrán de las fuerzas armadas, estos recibirán una capacitación especial que les permitirá desarrollar también de forma especializada las tareas de seguridad pública, las cuales implican un contacto cercano con la ciudadanía.
Durante su comparecencia en el Senado previo a su ratificación como titular de la CNS, Manuel Mondragón y Kalb indicó que dichos efectivos estarán capacitados bajo un “estricto régimen castrense”, pero también recibirán instrucción operativa, policiaca y teórica en conceptos sobre cultura de la legalidad, proximidad social y desarrollo comunitario.
Explicó que su función será la de apoyar en las tareas de seguridad en los municipios con mayor incidencia o debilidad institucional, y sin función será incluso similar a la de una “policía de proximidad”.
En una segunda fase, explicaron autoridades federales, se prevé la incorporación de otros diez mil elementos a la Gendarmería, pero ese grupo incluiría también a policías federales.
Por su parte el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, dio a conocer que la reglamentación de la Gendarmería estará lista dentro de poco tiempo, aunque aún faltan algunos detalles.
Indicó que el Ejército Mexicano está colaborando en la instrumentación de este nuevo cuerpo, cuyo objetivo es que con el paso de los años vaya incrementado su estado de fuerza.
Mil colonias prioritarias
Para coordinar los operativos preventivos y de inteligencia, el Gobierno Federal trabaja en la identificación de 250 polígonos en todo el país que representarán en total mil colonias, y que permitirán orientar los despliegues para concretar los llamados golpes de precisión en contra de la delincuencia organizada.
Hasta el momento, la firma de convenios e instalaciones de comités interinstitucionales en 19 estados, entre ellos Tamaulipas, Guerrero y Michoacán, ha permitido identificar ya 91 polígonos con 364 colonias, en los cuales se estará actuando tanto en el ámbito operativo como en el preventivo y social.
Alistan registro para identificar cadáveres
El Tribunal Superior de Justicia local y la PGR prevén poner en marcha este año la primera fase del llamado Registro Nacional de Identificación de Cadáveres, que facilitará la identificación de cuerpos y de personas desaparecidas.
El Presidente del TSJDF, Edgar Elías Azar, confió en que este registro, que se viene preparando desde hace tres años, ayudará a ubicar a personas que están reportadas como desaparecidas en muchas entidades del país, peor que no han sido identificadas por la falta de una herramienta homologada.
A nivel DF, la PGR y el Instituto Médico Forense de la ciudad ya comparten esta información, pero el plan es contar con las bases para que todas las entidades tengan acceso al mismo y se constituya como un registro nacional.
En términos prácticos, el registro es una base de datos en donde se tiene información completa de un cuerpo, tanto de rasgos físicos como genéticos, y que puede ser comparada en cualquier momento con datos o muestras de otras personas.
Autoridades del gobierno federal indicaron a 24 HORAS que este repliegue no incluiría a la Policía Federal, pues se mantendrá trabajando de forma coordinada con la Gendarmería y las autoridades estatales y municipales en los puntos de mayor violencia del país.
El plan, indicaron fuentes de la Comisión Nacional de Seguridad (CNS), dependerá de que la Gendarmería se encuentre en pleno funcionamiento a finales de este año, así como de los resultados de la evaluación que realice el Gobierno federal sobre la incidencia delictiva en diciembre.
Según las mismas fuentes, los hechos de violencia que se han registrado en los primeros tres meses de gobierno en regiones del país con presencia del crimen organizado, como Coahuila, Michoacán y Tamaulipas, imposibilitan que el trabajo de seguridad pública vuelva a recaer exclusivamente en las fuerzas locales en el corto plazo.
El miércoles, el subsecretario de Normatividad de Medios de la Secretaría de Gobernación, Eduardo Sánchez, negó que la violencia se debiera a un repliegue prematuro de las autoridades federales y, subrayó, que continuarían en el terreno el resto del año.
En este contexto, el plan de gobierno prevé para 2014 una “desmilitarización” en las calles, de las fuerzas convencionales del Ejército y la Armada. En su lugar se introducirá a los efectivos de la Gendarmería Nacional -que también serán militares- para trabajar de forma coordinada con la policía federal y las fuerzas locales.
Se trata, además, de que la Secretaría de Gobernación, que tiene bajo su jurisdicción a la Policía Federal y a la eventual Gendarmería, tenga la responsabilidad completa de la coordinación con los estados, lo que permitirá que las Secretarías de la Defensa Nacional y de Marina se enfoquen a sus tareas regulares de protección de la soberanía nacional, sin que ello excluya su involucramiento en operativos especiales.
Gendarmería castrense y policial
Aunque la Gendarmería Nacional estará integrada en un inicio por 10 mil elementos, que en su mayoría provendrán de las fuerzas armadas, estos recibirán una capacitación especial que les permitirá desarrollar también de forma especializada las tareas de seguridad pública, las cuales implican un contacto cercano con la ciudadanía.
Durante su comparecencia en el Senado previo a su ratificación como titular de la CNS, Manuel Mondragón y Kalb indicó que dichos efectivos estarán capacitados bajo un “estricto régimen castrense”, pero también recibirán instrucción operativa, policiaca y teórica en conceptos sobre cultura de la legalidad, proximidad social y desarrollo comunitario.
Explicó que su función será la de apoyar en las tareas de seguridad en los municipios con mayor incidencia o debilidad institucional, y sin función será incluso similar a la de una “policía de proximidad”.
En una segunda fase, explicaron autoridades federales, se prevé la incorporación de otros diez mil elementos a la Gendarmería, pero ese grupo incluiría también a policías federales.
Por su parte el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, dio a conocer que la reglamentación de la Gendarmería estará lista dentro de poco tiempo, aunque aún faltan algunos detalles.
Indicó que el Ejército Mexicano está colaborando en la instrumentación de este nuevo cuerpo, cuyo objetivo es que con el paso de los años vaya incrementado su estado de fuerza.
Mil colonias prioritarias
Para coordinar los operativos preventivos y de inteligencia, el Gobierno Federal trabaja en la identificación de 250 polígonos en todo el país que representarán en total mil colonias, y que permitirán orientar los despliegues para concretar los llamados golpes de precisión en contra de la delincuencia organizada.
Hasta el momento, la firma de convenios e instalaciones de comités interinstitucionales en 19 estados, entre ellos Tamaulipas, Guerrero y Michoacán, ha permitido identificar ya 91 polígonos con 364 colonias, en los cuales se estará actuando tanto en el ámbito operativo como en el preventivo y social.
Alistan registro para identificar cadáveres
El Tribunal Superior de Justicia local y la PGR prevén poner en marcha este año la primera fase del llamado Registro Nacional de Identificación de Cadáveres, que facilitará la identificación de cuerpos y de personas desaparecidas.
El Presidente del TSJDF, Edgar Elías Azar, confió en que este registro, que se viene preparando desde hace tres años, ayudará a ubicar a personas que están reportadas como desaparecidas en muchas entidades del país, peor que no han sido identificadas por la falta de una herramienta homologada.
A nivel DF, la PGR y el Instituto Médico Forense de la ciudad ya comparten esta información, pero el plan es contar con las bases para que todas las entidades tengan acceso al mismo y se constituya como un registro nacional.
En términos prácticos, el registro es una base de datos en donde se tiene información completa de un cuerpo, tanto de rasgos físicos como genéticos, y que puede ser comparada en cualquier momento con datos o muestras de otras personas.
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