Wikileaks revela nuevas evidencias de política injerencista de EE.UU
Escrito por Prensa Latina
El fundador de Wikileaks, Julian Assange, en videoconferencia desde la Embajada de Ecuador en Londres
La publicación de casi dos millones de cables confidenciales de
inteligencia de Estados Unidos por el sitio Wikileaks pone al
descubierto hoy nuevas evidencias sobre la política injerencista
norteamericana en los años 70 del siglo XX.
La publicación de casi dos millones de cables confidenciales de inteligencia de Estados Unidos por el sitio Wikileaks pone al descubierto hoy nuevas evidencias sobre la política injerencista norteamericana en los años 70 del siglo XX.
La serie de documentos clasificados fue presentada este lunes en una rueda de prensa en esta capital en la que participó el fundador de dicho sitio digital, Julian Assange, a través de una videoconferencia desde la Embajada de Ecuador en Londres, donde está refugiado desde junio de 2012.
El periodista de origen australiano afirmó que las informaciones revelan la gran extensión y amplitud de las actividades de la Casa Blanca en el mundo durante el período en que Henry Kissinger era secretario de Estado o consejero de seguridad nacional de los presidentes Richard Nixon y Gerald Ford, entre 1973 y 1976.
Los documentos recién publicados reflejan aspectos de la política exterior de Washington en una época turbulenta, en la que se desarrolló una parte de la agresión contra Vietnam, el escándalo Watergate y la dinámica compleja de la Guerra Fría, entre otros eventos donde la Casa Blanca tuvo un papel protagónico.
Entre los temas que aborda esta nueva hornada de textos está la responsabilidad de Washington en la Operación Cóndor, destinada a hacer desaparecer centenares de personas progresistas en América Latina.
En uno de los textos revelados aparece una expresión de Kissinger en una reunión con funcionarios turcos en la cual señala que Estados Unidos hace las operaciones ilegales en breves plazos, mientras las misiones que son contrarias a la Constitución del país norteño llevan un poco más de tiempo.
Wikileaks combinó en esta ocasión sus últimos archivos con los cables e informes secretos publicados desde 2010, e incluye correspondencia con el Congreso y reportes de espionaje que revelan la intromisión de Washington en los asuntos internos de otros países y el doble rasero de su política exterior, señalan especialistas.
Otros documentos se refieren a la supuesta colaboración de autoridades del Vaticano de esa época con Estados Unidos en apoyo al golpe de estado del general Augusto Pinochet en septiembre de 1973, que provocó la muerte del presidente constitucional Salvador Allende.
Según Assange, los documentos revelan que para Estados Unidos resulta una prioridad tener informantes dentro de los movimientos opositores a los gobiernos que no se pliegan a sus intereses, en parte para corromperlos pero también para tener opciones en ambos bandos en caso de que exista un cambio en el país en cuestión.
Ni representantes de la Casa Blanca o el Departamento de Estado han expresado sus criterios sobre las últimas revelaciones de Wikileaks.
Assange se refugió en la sede diplomática ecuatoriana en Londres para evitar ser extraditado a Suecia, país que lo reclama desde 2010 por un caso de supuesto abuso sexual a dos mujeres de esa nacionalidad, pero el acusado niega las denuncias porque dice que son por motivaciones políticas.
El Gobierno del presidente Rafael Correa le otorgó asilo político el pasado año, pero las autoridades británicas se niegan a otorgarle el salvoconducto correspondiente al activista australiano.
Wikileaks generó mucha atención mundial en 2010 tras haber publicado más de 250 mil cables diplomáticos norteamericanos.
El soldado del Ejército de Estados Unidos Bradley Manning, de 22 años, está preso desde 2010 , acusado de facilitar cientos de miles de documentos secretos sobre Irak y Afganistán y más de 250 mil cables diplomáticos clasificados al sitio Wikileaks.
Desde que comenzaron hace más de un año las audiencias previas al juicio en Fort Meade, estado de Maryland, la defensa de Manning no trató de negar que el exanalista militar en Irak filtrara información, sino que el alcance de los hechos es menos grave de lo que asegura el Gobierno de Estados Unidos.
El letrado denunció en varias ocasiones las duras condiciones en que permaneció detenido Manning el primer año tras su arresto en Irak en mayo de 2010, en una celda de poco menos de nueve metros cuadrados, así como los abusos cometidos contra él durante su reclusión de casi un año en la prisión de Quantico, estado de Virginia.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario