En Rusia encontraron rastros de un homínido desconocido

Foto: RIA Novosti

Paleontólogos rusos encontraron en Altái rastros de una especie desconocida del hombre primitivo. Al estudiar el genoma de los restos del Homo, hallados ahora en la célebre cueva Denísova, los científicos establecieron que en un 17 % coincide con el genoma del neandertal y en un 4 % con cierto homínido desconocido.

El resultado sensacional obligó a los arqueólogos, lo que se dice, a cavar más profundo. Actualmente las investigaciones se realizan en capas más antiguas que aquellas en que fue descubierto el homínido “denísovano”. 

Este no es el único resultado sensacional de las investigaciones. El descifrado del ADN de los restos de hombres primitivos de la cueva Denísova en el Altái, demostró que los habitantes contemporáneos del sureste de Asia tienen un 6 % de genes similares. Esto dio fundamento al jefe de la expedición, el académico Anatoli Derevianko, para declarar al homínido “denísovano” perteneciente a la subespecie del hombre de tipo contemporáneo. También se logró echar luz al proceso de división de la humanidad, que transcurrió 60-70 mil años atrás, dice el arqueólogo Mijaíl Shunkov: 

–Una parte de esta población marchó al Altái, donde se registraron los restos del homínido “denísovano” y otra parte emigró en dirección sureste. Cabe remarcar que en los territorios de tránsito – en el sureste de Asia, en China – en el genoma de los hombres fósiles no se hallaron rastros del homínido “denísovano”. Por otra parte, este 6 % descubierto en los habitantes contemporáneos del sureste, prueba que los homínidos “denísovanos” participaron en la formación del hombre de semblante contemporáneo. 

Además, durante las excavaciones los arqueólogos encontraron en una cueva vecina restos de un neandertal que vivió en la misma época que el homínido “denísovano”. Anteriormente se consideraba que los neandertales no llegaron tan lejos en dirección oriental. Así las cosas, surgió la idea de que ambos grupos de homínidos participaron conjuntamente en la formación del hombre contemporáneo, explica el científico: 

–Se trata de la llamada endogamia – fecundación entre personas de ascendencia común o naturales de una misma zona. Nuestros últimos trabajos demostraron que los homínidos “denísovanos” y los neandertales, encontrados en nuestra cueva, también se mezclaban entre sí. Y esto es un resultado sensacional. 

Ahora el cuadro de la formación de la humanidad es más o menos así. Existían cuatro vías de desarrollo del hombre de tipo contemporáneo: el homo sapiens africano, el neandertal euroasiático, el homínido “denísovano” del Altái y el hombre oriental, que habitaba el actual territorio de China. La antes popular teoría del monocentrismo – la salida del hombre de África – no resiste crítica alguna. Más convincente es la idea del académico Derevianko sobre el policentrismo, refrendada con los datos de paleontólogos y arqueólogos rusos. A propósito, en el mundo científico el hallazgo de restos del homínido “denísovano” está en segundo lugar tras el descubrimiento del bosón de Higgs. Por el relevante descubrimiento en el área del estudio de la humanidad prehistórica, el 12 de junio de 2013 se hizo entrega a Anatoli Derevianko del Premio Estatal de la Federación de Rusia. 

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Nota: Las opiniones expresadas por el autor no necesariamente coinciden con los puntos de vista de la redacción de La Voz de Rusia.

Elena Kováchich