Atilano Román, el defensor de comuneros que asesinaron a sangre fría
Por: Redacción Revolución /
20 octubre, 2014
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(20 de octubre, 2014).- Desde hace un tiempo, Atilano Román Tirado
era el personaje más visible y quien encabezaba a los afectados de la
presa Picachos, incluso en 2012 lideró una manifestación en la autopista
libre Mazatlán-Culiacán, debido a las inconformidades surgidas con la
construcción de la presa. A pesar de que él, junto a 26 comuneros y la
jurista Alma Barraza fueron detenidos por las Policía del estado de
Sinaloa, siguió su lucha y se volvió un personaje incómodo para el
gobierno, razón por la que tal vez lo asesinaron la mañana del sábado 11
de octubre en plena transmisión del programa radiofónico que conducía.
Para febrero de ese mismo año, Atilano
fue objeto de críticas y señalamientos por parte de medios y
autoridades, ya que supuestamente se había practicado una cirugía
plástica con el dinero que el gobierno sinaloense había otorgado como
indemnización para los afectados de Picachos. Sin embargo, su hermana
Eloiza Román salió en su defensa al afirmar que efectivamente se había
realizado una operación, pero no con los recursos que obtuvieron, como
afirmaban algunos, e instó a que le comprobaran las presuntas
irregularidades.
Dos días antes de su muerte, Román
exigió a las autoridades a que otorgaran los permisos de la Comisión
Nacional de Acuacultura y Pesca (Conapesca) para las cooperativas que
él encabeza, puesto que las otras cooperativas funcionan como negocios
familiares y pretendían lucrar con los intereses de la pesca. “No sólo
quieren los permisos para pescar sino también buscan incluirse en
turismo”, denunció en aquel momento.
En ese entonces, el luchador social
responsabilizó a la Conapesca del hambre tan fuerte que sufren los
comuneros, ya que la dependencia no otorgaba los permisos y por ende los
otros no podían adquirir recursos para alimentarse.
Unos días antes de que fuera asesinado
por sujetos que entraron por la fuerza en la cabina radiofónica de
Fiesta Mexicana, desde donde transmitía, Román Tirado
denunció que existía un fraude de aproximadamente 40 millones de pesos
en el pago por indemnización a los comuneros que fueron desplazados.
Señaló directamente como responsable al
exdiputado del PRD, Feliciano Castro Meléndez, quien se desempeñó como
titular de la Oficina de Enlace, al igual que a la institución bancaria
Banamex, ambos inmiscuidos en el pago de indemnización. Asimismo,
declaró que en 2010 el Congreso local, autorizó a la administración
estatal del priísta Jesús Aguilar, pagar 250 millones de pesos como
indemnización a los campesinos por la presa, recursos que fueron
cubiertos de dudas.
Todas estas acciones tal vez le costaron
la vida a Atilano, pues desde 2009 comenzó a ser ubicado como la
persona que luchaba por el respeto a los derechos de las familias que
perdieron sus viviendas a raíz de la inundación en el embalse de la
presa Picachos.
Aquella mañana sabatina, mientras
transmitía el programa Así es mi tierra, mediante la frecuencia 98.7 de
FM, tres individuos armados irrumpieron en las instalaciones de la
estación. Uno de ellos amenazó a los invitados, mientras que el otro le
disparó en tres ocasiones y ya en el suelo le dio un balazo más. Más
tarde murió en el hospital.
A la fecha, a pesar de que el secretario
de Gobierno de Sinaloa, Gerardo Vargas Landeros afirmó que el asesinato
sería esclarecido, los avances de las investigaciones siguen sin
llegar.
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