Sindicatos de Brasil denuncian regresión de sus derechos con reforma laboral
La
reforma laboral impuesta por el presidente de facto de Brasil, Michel
Temer, significa una regresión para los derechos de los trabajadores
conquistados durante décadas y consagrados en la Constitución,
denunciaron este lunes tres sindicatos brasileños ante la Comisión
Interamericana de los Derechos Humanos (CIDH).
En la 165 audiencia de la CIDH realizada en el Poder Legislativo, en Uruguay, los representantes de la Central Única de Trabajadores (CUT), la Nueva Central Sindical y la Unión General de Trabajadores (UGT) pidieron justicia ante la reforma laboral de Temer, que entrará en vigor el 11 de noviembre, porque contiene propuestas como jornadas de 12 horas con 30 minutos de descanso.
La reforma de Temer también propone flexibilizar la división de las vacaciones, la reducción de la jornada, la participación en beneficios y resultados, el banco de horas extra y el descanso para el almuerzo.
Además, la legislación pone por delante los acuerdos entre empresas y trabajadores sobre lo que dice la ley.
Los representantes sindicalistas también denunciaron ante la CIDH que el Gobierno brasileño viola las normas de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) sobre el trabajo esclavo, pues Temer impulsa una resolución que redefine a la esclavitud solo como las “restricciones a la libertad de desplazamiento” de los trabajadores. Según los expertos, esta reformulación hace retroceder al país antes del 13 de mayo de 1888, fecha en que se abolió la esclavitud en Brasil.
La oficina de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en Brasil ya expresó su “profunda preocupación” por la resolución sobre el trabajo esclavo.
El Gobierno de facto de Temer defendió la reforma laboral como un aspecto clave para el crecimiento económico y estimular la creación de empleo. Además, justificó que la ley ya existe en Estados Unidos, Portugal, Italia y Francia.
En la 165 audiencia de la CIDH realizada en el Poder Legislativo, en Uruguay, los representantes de la Central Única de Trabajadores (CUT), la Nueva Central Sindical y la Unión General de Trabajadores (UGT) pidieron justicia ante la reforma laboral de Temer, que entrará en vigor el 11 de noviembre, porque contiene propuestas como jornadas de 12 horas con 30 minutos de descanso.
La reforma de Temer también propone flexibilizar la división de las vacaciones, la reducción de la jornada, la participación en beneficios y resultados, el banco de horas extra y el descanso para el almuerzo.
Además, la legislación pone por delante los acuerdos entre empresas y trabajadores sobre lo que dice la ley.
Los representantes sindicalistas también denunciaron ante la CIDH que el Gobierno brasileño viola las normas de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) sobre el trabajo esclavo, pues Temer impulsa una resolución que redefine a la esclavitud solo como las “restricciones a la libertad de desplazamiento” de los trabajadores. Según los expertos, esta reformulación hace retroceder al país antes del 13 de mayo de 1888, fecha en que se abolió la esclavitud en Brasil.
La oficina de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en Brasil ya expresó su “profunda preocupación” por la resolución sobre el trabajo esclavo.
El Gobierno de facto de Temer defendió la reforma laboral como un aspecto clave para el crecimiento económico y estimular la creación de empleo. Además, justificó que la ley ya existe en Estados Unidos, Portugal, Italia y Francia.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario