Los
aviones de combate de Turquía han bombardeado la base aérea de Menagh
en el noroeste de Siria. De acuerdo con las activistas locales, el
blanco de los bombardeos han sido los combatientes kurdo-sirios
estacionados en esta instalación militar, la más grande en el norte de
la provincia de Alepo.
Los bombardeos perpetrados la noche del
sábado al domingo, se han llevado a cabo en el marco de la ‘flagrante
agresión’ turca, bautizada como ‘Rama de Olivo’, que comenzó el 19
enero.Es la primera vez durante la guerra siria que Menagh es golpeada por una entidad extranjera.
Además de bombardear la base aérea de Menagh, las fuerzas turcas están bombardeando varias áreas bajo el control de las Unidades de Protección Popular (YPG, por sus siglas en kurdo), en la región siria de Afrin y la ciudad de Tal Rifaat.
Ante los ataques aéreos turcos el temor cundió entre los civiles en las mencionadas regiones, que procedieron a refugiarse en las bodegas de sus casas o salieron a las calles sin saber qué hacer.
Las YPG dicen que unas 10 personas, incluyendo siete civiles, han perdido la vida y 25 han resultado heridas como consecuencia de la operación militar turca contra Afrin el sábado, en la cual también participan los llamados ‘rebeldes’ sirios.
Conforme a los testigos presentes en el lugar, los vehículos militares de las YPG se han desplegado en las calles de Afrin en medio de las informaciones de que tanques y vehículos blindados de Turquía ya han entrado en el suelo sirio, dirigiéndose hacia esta región.
Por su parte, el Gobierno sirio expresó el sábado su firme rechazo a los ataques aéreos turcos en su territorio y los tachó de una “flagrante agresión” a la soberanía siria, para después llamar a la comunidad internacional a condenar la operación turca y a tomar “todas las medidas necesarias para detenerla de inmediato”.
Ankara se opone con vehemencia a las YPG, pues las acusa de ser el vástago sirio del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK, por sus siglas en kurdo), que ha llevado a cabo una rebelión en el sureste de Turquía durante más de tres décadas. Las autoridades turcas lo catalogan como ‘terrorista’.
Turquía ha iniciado esta serie de ataques mientras cuestiona la nueva medida de la llamada coalición contra el grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe), liderada por Estados Unidos, encaminada a entrenar a un nuevo ejército compuesto por 30.000 milicianos kurdo-árabes en Siria.
zss/ctl/msf
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