kaosenlared.net
Tortura en Argelia, la herida francesa
61 años, 3 meses y dos días ha durado la mentira
sobre el destino del joven matemático, tras ser torturado y hecho
desaparecer por miembros del ejército francés…Maurice Audin , símbolo de
la bestial actuación de los paracas y demás, enviados por París, por
las tierras argelinas
Por Iñaki Urdanibia
Decir Argelia ( Algèrie en francés ) lleva emparejada una serie de cuestiones que en el caso francés adquiere un carácter más profundo y de incómoda conmoción, tras la conclusión de la guerra en marzo de 1962. Guerra colonialista una de cuyas armas más presente fue la aplicación generalizada de la tortura ( como método de obtener información, como sistema de castigo y escarmiento, y como sello que dejaba claro quién detentaba el poder allá); nombrar la tortura y asociarlo con Maurice Audin es todo uno, ya que el joven matemático detenido, torturado y desaparecido es sin lugar a dudas el símbolo de la tortura aplicada hasta la muerte. De igual modo los nombres de la entrada del metro Charonne o del canal de Saint Denis, con los cadáveres de argelinos, fueron el signo de los siniestros asesinatos cometidos en la misma capital de la metrópolis, la capital del Sena.
Donde hay opresión hay resistencia , y no me refiero a la guerra anti-colonialista desencadenada, en 1954, por los ciudadanos argelinos contra el ocupante que había llegado allá en las últimas décadas del siglo XIX, declarando aquella tierra magrebí en una más de las provincias de ultramar ( eufemismo con que la burocracia estatal gala denomina a las colonias: TOM-DOM, territorios o departamentos de outremer), sino también a quienes no siendo ciudadanos argelinos apoyaron la lucha del FLN, convirtiéndose en algunos ocasiones en porteurs de valisses, y/o en firmantes del célebre manifiesto de los 121, en aquellos años en que la lucha de los argelinos servía de modelo para las luchas de liberación nacional. [ Con el fin de no repetirme, para quien quiera conocer algunas de las vicisitudes de la nombrada guerra, de la tortura y más en concreto al affaire Audin, he colocado al final del artículo algunos enlaces relacionados con los temas nombrados].
Plus vaut tard que jamais
Tras la firma del tratado de Evian con el que se ponía fin a la guerra, el colonialismo, bajo diversas formas, continuó existiendo, mas lo que sí que siguió teniendo una rabiosa presencia, que revistió el rostro de la revancha y el odio, en conflictos como los de la banlieue, y las tensiones entre franceses de pure souche o de orígen magrebí…Mas dejando esta de cuestión no está de más señalar cómo en esta ocasión la versión histórica ha ido mucho más adelantada que la versión oficial, que habitualmente ha pretendido justificar la guerra argelina , sin reparar mayormente en los sistemas brutales aplicados ( algunos hasta vanagloriándose de haber torturado en Argel, así el padre de Marine Le Pen), y hasta ha puesto de relieve la labor civilizadora de la douce Frence. Ya en le momento de los hechos salieron a la palestra voces que denunciaban la desaparición del joven , haciéndoles responsable de ello al ejército francés, posturas mal consideradas ya que iban en contra de la moral de la tropa y de la patria.
Pues bien, han hecho falta seis presidentes, para que el séptimo Emmanuel Macron proclamara, en un gesto histórico, que el Estado francés es responsable de la muerte y desaparición de Maurice Audin. Así se lo hace saber a la viuda del asesinado en una carta personal en la que señalaba que « este sistema de “arresto-detención” ha sido el desgraciado terreno en el que actos a veces terribles, entre los que destaca la tortura, que el caso Audin ha sacado a la luz» e igualmente en una solemne declaración en la que se dice que « si la muerte de M. Audin es en última instancia, el hecho de algunos , ha sido facilitada por un sistema legalmente instituido : el sistema “arresto-detención”, puesto en práctica a favor de los poderes especiales que habían sido confiados por vía legal a las fuerzas armadas en ese periodo» …No cabe duda de que , a cada cual lo suyo, Emmanuel Macron ha dado un paso valiente y necesario para proclamar en nombre de la République lo que era un grito para los ciudadanos franceses, paso que ya había adelantado, hace como un año, provocando una ruidosa protesta, al afirmar que la colonización e Francia había provocado no pocos crímenes.
La actual declaración ( Déclaration du président de la Republique à propos de l´affaire Maurice Audin ) que sitúa la desaparición y muerte bajo torturas del matemático e indepedendista argelino como ejemplo de la actuación del ejército francés en tierras argelinas, actuación decretada por el parlamento- y por el gobierno de supuesta izquierda sea dicho al pasar- dejando en manos de los militares la dirección de la guerra y de la política que se debía de llevar por aquellos territorios del norte africano. Así pues, la responsabilidad de la muerte de Audin, y de otros, la tortura generalizada…no fue cosa de unos pocos desmadrados sino una estrategia organizada de cabo a rabo por los paracas, en especial. La prensa ha acogido la declaración presidencial con aplausos: con respecto al diario L´Humanité, à la une dice: Maurice Audin / El crimen de Estado reconocido por el presidente. En Fin!basta con ver la imagen que ilustra este artículo, para Le Monde: Le geste historique d´Emmamuel Macron, Libé dice que Macron admite el sistema de tortura implantado en Argelia, Le Magazine littéraire en su último número habla de que Francia asume una de las paginas más negras de su historia reciente…Los historiadores muestran su satisfacción: Benjamin Stora afirma que « esta declaración se inscribe en la gran tradición de decisiones de reconocimiento , como en otro registro , el discurso de Chirac sobre el Vél d´Hiv…la declaración va a liberar a muchos corazones y mentes del peso que les acongojaba», Raphaëlle Branche autora de un impresionante libro, La torture et l’armée pendant la guerre d’Algérie (1954-1962), editado en Gallimard– dice que « Ya no erá posible negar el carácter sistemático de la tortura en Argelia», Silvye Thénault declara que « el reconocimiento de las responsabilidades del estado, tras sesenta y un años de un combate tenaz»…Algunos militares puntualizan de que no se ha de tomar lo dicho como que todos los militares actuaron así, en su corporativismo bélico…la derecha extrema trinará de un momento a otro sino ha trinado ya…Mientras que la mentira de Estado que desde el mismo momento de los hechos denunciaran el historiador Pierre Vidal-Naquet, el matemático Laurent Scwart, Henri Alleg y la viuda, Josette, que hoy cuenta con le edad de 87 años , han visto al final reconocida la verdad y justicia de su combate…Precisamente la declaración presidencial se inicia con una cita del historiador nombrado, el prestigioso helenista y mitólogo, amén de otras cosas: « Este sistema se había instalado sin mediar ninguna modificación del Código penal , sin que los principios de 1789 hayan cesado de ser proclamados como la base del Estado y sin que los gobiernos hayan cesado de decir oficialmente que la tortura era condenable, si incluso ellos persiguiesen a quienes denunciaban a quienes la practicaban».
———————————————————————-
Para completar la presentación del tema
+ Estos dos primeros enlaces envían a un artículo aniversario sobre la guerra argelina; y el otro a una novela relacionada con tal conflicto bélico:
http://2014.kaosenlared.net/component/k2/item/9668-la-herida-argelina-sigue-abierta.html#
http://ftp.kaosenlared.net/secciones/51805-verdugos-y-v%C3%ADctim
Añado una recensión, publicada en prensa, de un par de libros que tratan el tema en diferentes aspectos :
La gangrena del olvido
+ François Malye et Benjamín Stora
François Mitterand et la guerre d´Algérie
Calmann-Lévy, 2010.
309 págs. / 18 €..
+ Etienne Edme-Zamora
Ma guerre d´Algérie racontée à mes enfants et petits- enfants
Elkar, 2010.
168 págs.
La verdad es que por razones que no vienen al caso, además de por motivos de generación, siempre he tenido gran interés por la guerra de Argelia, es así como me acerqué a los documentados libros del especialista en el tema, Benjamín Stora, de uno de sus libros tomo precisamente casi prestado el título de este comentario. La lucha anticolonialista guiada por el FLN, la brutalidad de los paracas franceses, la escalofriante película << La batalla de Argel>> o el no menos escalofriante testimonio de Henri Alleg(recién editado por la hondarribitarra Hiru), los ejemplares <<porteurs de valisses>> o los dignos firmantes del manifiesto de los 121( Sartre, Beauvoir, Jeanson, Vidal-Naquet…), o los escritos del combativo psiquiatra Franz Fanon, o todavía la justeza del posicionamiento de Jean-François Lyotard quien afirmaba con tino que aunque posteriormente se pudiese temer la presencia de un castrante aparato burocrático-militar que usurpase la justicia de la causa por la que se luchaba eso no quitaba para el deber de apoyarla en aquellos momentos ,… son algunos de los nombres propios, y obras, junto a otros, que se amontonan en mi mente.
La guerra
No era , desde luego, de la misma opinión el entonces más joven François Mitterand quien como ministro del interior de un gobierno socialistas(de Guy Mollet) no dudó en emprenderla con los argelinos que intentaban expulsar a los franceses de su país. Diré de paso que no es un caso aislado el pringue de los sociademócratas ( de “social-fascistas” llegaron a tildarles algunos) siempre dispuestos a mantener sus cotas de poder-de gestionar los intereses del capital- yendo desde la vista gorda(o más bien el propiciarlo) del asesinato de los espartaquistas, hasta tomar las medidas “progresistas” en lo económico siempre a costa de los de abajo y en beneficio de los de arriba(advierto que si lo que digo parece un panfleto, quizá es que la realidad es así, como un panfleto). Pero a lo que iba- ¿o todavía me voy por otro lado?- muchas de estas impresentables actuaciones para cualquier sensibilidad de pretendida izquierda no cuentan a la hora de lograr apoyos electorales( muchos de los repatriados de Argelia le apoyaron en su primera elección, la de 1981) y otros apoyos; no es extraño así que Sartre- y los muchachos del 68 le coreasen- aquello de elections pège à cons (elecciones, trampa para chorras), como sí resulta curioso-al menos para el que esto escribe- ver estatuas de homenaje del gran hombre francés con su perrito(como se puede observar, por ejemplo en la población landesa de Soustons en donde veraneaba el gran hombre).
Estas cuestiones sólo las han removido los ambientes de la extrema izquierda. Ahora este libro habla del affaire ( << la falta cometida en mi vida>> según sus propias palabras )con una precisión y una exhaustividad encomiables. La ambición de Mitterand-que ya había salvado la ropa en los tiempos de Vichy, cubriendo las oscuridades con una participación tardía en alguna red de resistentes- situaba al flamante ministro ante las decisiones más tajantes, y cruentas, para mantener la “provincia argelina” bajo la bota de la France. Sin parpadear firmaba decretos y mantenía como normal el castigo por medio de la guillotina a los rebeldes y traidores a la grandeur de la patrie. En honor a la justicia se ha de subrayar que el joven ministro(37 años contaba por entonces) intentaba lograr la “integración” de los argelinos, sin confiar en exceso de ellos. La ambigüedad se traducía en que del mismo modo que enviaba contingentes de CRS al otro lado del Mediterráneo, intentaba apartar del lugar a los esbirros , cuyas torturas saltaban a la opinión pública; tampoco le temblaba el pulso para apoyar sin remilgos la aplicación de la guillotina , a pesar de las protestas de otros colegas de gabinete como Mèndes France , o de firmar los salvajes <<poderes especiales>> que hacían que el poder militar adquiriese autonomía con respecto a los otros poderes y asumiese de hecho el control total de la situación; y sabido es como señalase el otro: lo contrario de civil es militar, lo contrario de civilizar es militarizar; <<la connerie de guerre>> de la que hablase el poeta Jacques Prévert.
El libro es esclarecedor a tope y lucha contra la gangrena del olvido y en pro del deber de memoria, de la verdadera y no la trucada desde las instancias de la sociedad bienpensante.
Un soldado
Bien distinta es la postura de Etienne Edme-Zamora que fue movilizado y pasó prácticamente dos años <<sirviendo a la patria>> frente a los rebeldes que pretendían negar la francesidad de Argelia. Con veinte años le tocó la experiencia y tentado por la curiosidad de sus hijos y de sus nietos que querían saber cómo habían sido aquellos años, Etienne Edme-Zamora se decidió a contar “su” guerra, no como héroe, ni como protagonista de pretendidas hazañas bélicas, sino como un joven a quien te tocó ser enrolado para beneficio de los colonialistas franceses que tras las soflamas patrióticas escondían sus innegables intereses económicos y estratégicos. La materia prima de este relato no es desde luego el olvido sino la memoria.
Los días de aquella forzada cotidianeidad son narrados por este hombre que fue obligado por los comerciantes de cañones a ir a un país extraño a tratar de seguir imponiendo la bota de los opresores extranjeros. Desde sus días de adiestramiento, pasando por su participación en algunas escaramuzas y algunos permisos que le permiten conocer aquel país, en el que luchaban unos <<Ahmed>> por liberar a su patria de unos <<François>> que disparaban frente a ellos. El protagonista deja claro su posicionamiento anticolonialista y a favor de la libertad.
+ Estos otros tratan del caso Audin , de las circunstancias de su asesinato tras ser brutalmente torturado, incluyendo un escrito necesario y conmovedor sobre la tortura :
http://pop.kaosenlared.net/kaos-tv/60669-l%C2%B4affaire-audin
http://ftp.kaosenlared.net/secciones/s/anarquismos/64180-henri-alleg-se-fue#
http://ftp.kaosenlared.net/component/k2/80282-la-france–un-pasado-que-no-pasa
Por Iñaki Urdanibia
Decir Argelia ( Algèrie en francés ) lleva emparejada una serie de cuestiones que en el caso francés adquiere un carácter más profundo y de incómoda conmoción, tras la conclusión de la guerra en marzo de 1962. Guerra colonialista una de cuyas armas más presente fue la aplicación generalizada de la tortura ( como método de obtener información, como sistema de castigo y escarmiento, y como sello que dejaba claro quién detentaba el poder allá); nombrar la tortura y asociarlo con Maurice Audin es todo uno, ya que el joven matemático detenido, torturado y desaparecido es sin lugar a dudas el símbolo de la tortura aplicada hasta la muerte. De igual modo los nombres de la entrada del metro Charonne o del canal de Saint Denis, con los cadáveres de argelinos, fueron el signo de los siniestros asesinatos cometidos en la misma capital de la metrópolis, la capital del Sena.
Donde hay opresión hay resistencia , y no me refiero a la guerra anti-colonialista desencadenada, en 1954, por los ciudadanos argelinos contra el ocupante que había llegado allá en las últimas décadas del siglo XIX, declarando aquella tierra magrebí en una más de las provincias de ultramar ( eufemismo con que la burocracia estatal gala denomina a las colonias: TOM-DOM, territorios o departamentos de outremer), sino también a quienes no siendo ciudadanos argelinos apoyaron la lucha del FLN, convirtiéndose en algunos ocasiones en porteurs de valisses, y/o en firmantes del célebre manifiesto de los 121, en aquellos años en que la lucha de los argelinos servía de modelo para las luchas de liberación nacional. [ Con el fin de no repetirme, para quien quiera conocer algunas de las vicisitudes de la nombrada guerra, de la tortura y más en concreto al affaire Audin, he colocado al final del artículo algunos enlaces relacionados con los temas nombrados].
Plus vaut tard que jamais
Tras la firma del tratado de Evian con el que se ponía fin a la guerra, el colonialismo, bajo diversas formas, continuó existiendo, mas lo que sí que siguió teniendo una rabiosa presencia, que revistió el rostro de la revancha y el odio, en conflictos como los de la banlieue, y las tensiones entre franceses de pure souche o de orígen magrebí…Mas dejando esta de cuestión no está de más señalar cómo en esta ocasión la versión histórica ha ido mucho más adelantada que la versión oficial, que habitualmente ha pretendido justificar la guerra argelina , sin reparar mayormente en los sistemas brutales aplicados ( algunos hasta vanagloriándose de haber torturado en Argel, así el padre de Marine Le Pen), y hasta ha puesto de relieve la labor civilizadora de la douce Frence. Ya en le momento de los hechos salieron a la palestra voces que denunciaban la desaparición del joven , haciéndoles responsable de ello al ejército francés, posturas mal consideradas ya que iban en contra de la moral de la tropa y de la patria.
Pues bien, han hecho falta seis presidentes, para que el séptimo Emmanuel Macron proclamara, en un gesto histórico, que el Estado francés es responsable de la muerte y desaparición de Maurice Audin. Así se lo hace saber a la viuda del asesinado en una carta personal en la que señalaba que « este sistema de “arresto-detención” ha sido el desgraciado terreno en el que actos a veces terribles, entre los que destaca la tortura, que el caso Audin ha sacado a la luz» e igualmente en una solemne declaración en la que se dice que « si la muerte de M. Audin es en última instancia, el hecho de algunos , ha sido facilitada por un sistema legalmente instituido : el sistema “arresto-detención”, puesto en práctica a favor de los poderes especiales que habían sido confiados por vía legal a las fuerzas armadas en ese periodo» …No cabe duda de que , a cada cual lo suyo, Emmanuel Macron ha dado un paso valiente y necesario para proclamar en nombre de la République lo que era un grito para los ciudadanos franceses, paso que ya había adelantado, hace como un año, provocando una ruidosa protesta, al afirmar que la colonización e Francia había provocado no pocos crímenes.
La actual declaración ( Déclaration du président de la Republique à propos de l´affaire Maurice Audin ) que sitúa la desaparición y muerte bajo torturas del matemático e indepedendista argelino como ejemplo de la actuación del ejército francés en tierras argelinas, actuación decretada por el parlamento- y por el gobierno de supuesta izquierda sea dicho al pasar- dejando en manos de los militares la dirección de la guerra y de la política que se debía de llevar por aquellos territorios del norte africano. Así pues, la responsabilidad de la muerte de Audin, y de otros, la tortura generalizada…no fue cosa de unos pocos desmadrados sino una estrategia organizada de cabo a rabo por los paracas, en especial. La prensa ha acogido la declaración presidencial con aplausos: con respecto al diario L´Humanité, à la une dice: Maurice Audin / El crimen de Estado reconocido por el presidente. En Fin!basta con ver la imagen que ilustra este artículo, para Le Monde: Le geste historique d´Emmamuel Macron, Libé dice que Macron admite el sistema de tortura implantado en Argelia, Le Magazine littéraire en su último número habla de que Francia asume una de las paginas más negras de su historia reciente…Los historiadores muestran su satisfacción: Benjamin Stora afirma que « esta declaración se inscribe en la gran tradición de decisiones de reconocimiento , como en otro registro , el discurso de Chirac sobre el Vél d´Hiv…la declaración va a liberar a muchos corazones y mentes del peso que les acongojaba», Raphaëlle Branche autora de un impresionante libro, La torture et l’armée pendant la guerre d’Algérie (1954-1962), editado en Gallimard– dice que « Ya no erá posible negar el carácter sistemático de la tortura en Argelia», Silvye Thénault declara que « el reconocimiento de las responsabilidades del estado, tras sesenta y un años de un combate tenaz»…Algunos militares puntualizan de que no se ha de tomar lo dicho como que todos los militares actuaron así, en su corporativismo bélico…la derecha extrema trinará de un momento a otro sino ha trinado ya…Mientras que la mentira de Estado que desde el mismo momento de los hechos denunciaran el historiador Pierre Vidal-Naquet, el matemático Laurent Scwart, Henri Alleg y la viuda, Josette, que hoy cuenta con le edad de 87 años , han visto al final reconocida la verdad y justicia de su combate…Precisamente la declaración presidencial se inicia con una cita del historiador nombrado, el prestigioso helenista y mitólogo, amén de otras cosas: « Este sistema se había instalado sin mediar ninguna modificación del Código penal , sin que los principios de 1789 hayan cesado de ser proclamados como la base del Estado y sin que los gobiernos hayan cesado de decir oficialmente que la tortura era condenable, si incluso ellos persiguiesen a quienes denunciaban a quienes la practicaban».
———————————————————————-
Para completar la presentación del tema
+ Estos dos primeros enlaces envían a un artículo aniversario sobre la guerra argelina; y el otro a una novela relacionada con tal conflicto bélico:
http://2014.kaosenlared.net/component/k2/item/9668-la-herida-argelina-sigue-abierta.html#
http://ftp.kaosenlared.net/secciones/51805-verdugos-y-v%C3%ADctim
Añado una recensión, publicada en prensa, de un par de libros que tratan el tema en diferentes aspectos :
La gangrena del olvido
+ François Malye et Benjamín Stora
François Mitterand et la guerre d´Algérie
Calmann-Lévy, 2010.
309 págs. / 18 €..
+ Etienne Edme-Zamora
Ma guerre d´Algérie racontée à mes enfants et petits- enfants
Elkar, 2010.
168 págs.
La verdad es que por razones que no vienen al caso, además de por motivos de generación, siempre he tenido gran interés por la guerra de Argelia, es así como me acerqué a los documentados libros del especialista en el tema, Benjamín Stora, de uno de sus libros tomo precisamente casi prestado el título de este comentario. La lucha anticolonialista guiada por el FLN, la brutalidad de los paracas franceses, la escalofriante película << La batalla de Argel>> o el no menos escalofriante testimonio de Henri Alleg(recién editado por la hondarribitarra Hiru), los ejemplares <<porteurs de valisses>> o los dignos firmantes del manifiesto de los 121( Sartre, Beauvoir, Jeanson, Vidal-Naquet…), o los escritos del combativo psiquiatra Franz Fanon, o todavía la justeza del posicionamiento de Jean-François Lyotard quien afirmaba con tino que aunque posteriormente se pudiese temer la presencia de un castrante aparato burocrático-militar que usurpase la justicia de la causa por la que se luchaba eso no quitaba para el deber de apoyarla en aquellos momentos ,… son algunos de los nombres propios, y obras, junto a otros, que se amontonan en mi mente.
La guerra
No era , desde luego, de la misma opinión el entonces más joven François Mitterand quien como ministro del interior de un gobierno socialistas(de Guy Mollet) no dudó en emprenderla con los argelinos que intentaban expulsar a los franceses de su país. Diré de paso que no es un caso aislado el pringue de los sociademócratas ( de “social-fascistas” llegaron a tildarles algunos) siempre dispuestos a mantener sus cotas de poder-de gestionar los intereses del capital- yendo desde la vista gorda(o más bien el propiciarlo) del asesinato de los espartaquistas, hasta tomar las medidas “progresistas” en lo económico siempre a costa de los de abajo y en beneficio de los de arriba(advierto que si lo que digo parece un panfleto, quizá es que la realidad es así, como un panfleto). Pero a lo que iba- ¿o todavía me voy por otro lado?- muchas de estas impresentables actuaciones para cualquier sensibilidad de pretendida izquierda no cuentan a la hora de lograr apoyos electorales( muchos de los repatriados de Argelia le apoyaron en su primera elección, la de 1981) y otros apoyos; no es extraño así que Sartre- y los muchachos del 68 le coreasen- aquello de elections pège à cons (elecciones, trampa para chorras), como sí resulta curioso-al menos para el que esto escribe- ver estatuas de homenaje del gran hombre francés con su perrito(como se puede observar, por ejemplo en la población landesa de Soustons en donde veraneaba el gran hombre).
Estas cuestiones sólo las han removido los ambientes de la extrema izquierda. Ahora este libro habla del affaire ( << la falta cometida en mi vida>> según sus propias palabras )con una precisión y una exhaustividad encomiables. La ambición de Mitterand-que ya había salvado la ropa en los tiempos de Vichy, cubriendo las oscuridades con una participación tardía en alguna red de resistentes- situaba al flamante ministro ante las decisiones más tajantes, y cruentas, para mantener la “provincia argelina” bajo la bota de la France. Sin parpadear firmaba decretos y mantenía como normal el castigo por medio de la guillotina a los rebeldes y traidores a la grandeur de la patrie. En honor a la justicia se ha de subrayar que el joven ministro(37 años contaba por entonces) intentaba lograr la “integración” de los argelinos, sin confiar en exceso de ellos. La ambigüedad se traducía en que del mismo modo que enviaba contingentes de CRS al otro lado del Mediterráneo, intentaba apartar del lugar a los esbirros , cuyas torturas saltaban a la opinión pública; tampoco le temblaba el pulso para apoyar sin remilgos la aplicación de la guillotina , a pesar de las protestas de otros colegas de gabinete como Mèndes France , o de firmar los salvajes <<poderes especiales>> que hacían que el poder militar adquiriese autonomía con respecto a los otros poderes y asumiese de hecho el control total de la situación; y sabido es como señalase el otro: lo contrario de civil es militar, lo contrario de civilizar es militarizar; <<la connerie de guerre>> de la que hablase el poeta Jacques Prévert.
El libro es esclarecedor a tope y lucha contra la gangrena del olvido y en pro del deber de memoria, de la verdadera y no la trucada desde las instancias de la sociedad bienpensante.
Un soldado
Bien distinta es la postura de Etienne Edme-Zamora que fue movilizado y pasó prácticamente dos años <<sirviendo a la patria>> frente a los rebeldes que pretendían negar la francesidad de Argelia. Con veinte años le tocó la experiencia y tentado por la curiosidad de sus hijos y de sus nietos que querían saber cómo habían sido aquellos años, Etienne Edme-Zamora se decidió a contar “su” guerra, no como héroe, ni como protagonista de pretendidas hazañas bélicas, sino como un joven a quien te tocó ser enrolado para beneficio de los colonialistas franceses que tras las soflamas patrióticas escondían sus innegables intereses económicos y estratégicos. La materia prima de este relato no es desde luego el olvido sino la memoria.
Los días de aquella forzada cotidianeidad son narrados por este hombre que fue obligado por los comerciantes de cañones a ir a un país extraño a tratar de seguir imponiendo la bota de los opresores extranjeros. Desde sus días de adiestramiento, pasando por su participación en algunas escaramuzas y algunos permisos que le permiten conocer aquel país, en el que luchaban unos <<Ahmed>> por liberar a su patria de unos <<François>> que disparaban frente a ellos. El protagonista deja claro su posicionamiento anticolonialista y a favor de la libertad.
+ Estos otros tratan del caso Audin , de las circunstancias de su asesinato tras ser brutalmente torturado, incluyendo un escrito necesario y conmovedor sobre la tortura :
http://pop.kaosenlared.net/kaos-tv/60669-l%C2%B4affaire-audin
http://ftp.kaosenlared.net/secciones/s/anarquismos/64180-henri-alleg-se-fue#
http://ftp.kaosenlared.net/component/k2/80282-la-france–un-pasado-que-no-pasa
No hay comentarios.:
Publicar un comentario