martes, 26 de marzo de 2013

Reforma energética será más conservadora

Reforma energética será más conservadora

Eso advierte Alejandro Schtulmann, jefe de investigación y análisis de riesgo político en mercados emergentes de EMPRA
La reforma energética será más conservadora porque no se puede abrir Pemex a la inversión extranjera tan rápido como lo plantean el gobierno y expertos.

Así lo dijo a 24 HORAS Alejandro Schtulmann, jefe de investigación y análisis de riesgo político en mercados emergentes de EMPRA, al ser consultado sobre la posibilidad de que se abra Pemex al sector privado y extranjero.
 
“La reforma energética como yo la veo quizá va a ser un poco más conservadora de lo que mucha gente piensa. Sí va a haber modificaciones de artículos constitucionales, pero lo más importante de todo es entender que Pemex no puede abrirse a la inversión extranjera en un ángulo de 180 grados”, expuso.

“Tiene que empezar primero por la apertura de todos los sectores secundarios, es ahí que tiene que empezar a fluir la inversión extranjera directa. En lo que se puede restructurar Pemex, que se constituye las finanzas de Pemex, una reforma de la que nadie está hablando ahorita es la reforma del sistema de pensiones (de la paraestatal), que es sumamente importante y vendría a darle la sostenibilidad financiera”, agregó el especialista.

Schtulmann señaló que en un principio la reforma energética debe hacer ciertos ajustes al interior de Pemex y abrir los sectores secundarios para que luego, en una segunda etapa, se pueda empezar a vender acciones de la paraestatal en la Bolsa Mexicana de Valores.

El experto en temas energéticos consideró que nuestro país tiene un futuro prometedor en este sector específico, sin embargo ese futuro depende de la restitución de reservas probabas por reservas probables.

“Obviamente eso depende de una mayor inversión en el sector y por eso es que estamos hablando de una reforma energética. Sin una reforma energética nunca se van a poder atraer las inversiones necesarias para potencializar las reservas de México”, insistió.

No obstante, la constitución actual de la petrolera estatal, explicó, hace que nuestro país ya no sea suficientemente competitivo ante las multinacionales, porque a pesar de ser un productor y exportador importante de petróleo, la producción de este combustible del país disminuyó en los últimos años, lo que ha forzado al gobierno a importarlo, además de tener que importar gasolina y gas natural para responder a la demanda nacional.

“Uno de los objetivos de la reforma sería modificar las leyes en lo que tiene que ver con refinación y que pueda haber inversión privada en refinación. Como están las cosas ahorita, la refinería que se está proyectando para 2016 o 2017 en el estado de Hidalgo, no tiene viabilidad económica. Entonces, Pemex es hasta ahora un monopolio que tiene un patrimonio negativo. Son las cosas que tienen que cambiar”, argumentó.

La apertura a la inversión privada es una buena noticia, consideró, ya que México deberá seguir el paso de Noruega con Statoil, Brasil con Petrobras, o de Arabia Saudita con Saudi Aramco, para ser más competitivo ante las multinacionales petroleras del mundo.

“Pero siempre y cuando se hagan los cambios necesarios internos para que se pueda realmente aprovechar esa inversión”, concluyó.

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