jueves, 25 de abril de 2013

Hollande arribó a China para revisar y fortalecer relaciones comerciales Presidente francés revisará las relaciones bilaterales con el país asiático (Foto: Archivo) 3 1 0 0 El Gobierno de Beijing aspira que la visita del Presidente de Francia a su país “aumente la confianza mutua, profundice la cooperación pragmática, incremente la comunicación en asuntos internacionales y eleve las relaciones bilaterales a un nuevo nivel". El presidente de Francia, Francois Hollande, arribó este jueves a la ciudad de Beijing, en el marco de una visita oficial de dos días que realiza a la nación asiática, durante la cual espera sostener un encuentro privado con su homólogo chino, Xi Jinping, además de revisar las relaciones bilaterales y cerrar vitales acuerdos en sectores como el aeronáutico o el nuclear. La Cancillería francesa detalló que Hollande viaja acompañado por una comitiva que integra parte de su Gabinete Ejecutivo -especialmente las carteras económicas y financieras- y representantes de al menos 50 grandes compañías francesas, lo que advierte del carácter eminentemente comercial del viaje. Además de la reunión con Jinping, también tiene previsto conversar con el primer ministro, Li Kegiang, y con el presidente del Comité Permanente de la Asamblea Popular Nacional, Zhang Dejiang, sobre asuntos internacionales y regionales de interés común, como por ejemplo la crisis económica en el continente europeo. Con esta visita de aproximadamente 37 horas, Hollande se convierte en el primer mandatario occidental que viaja a China desde que Xi Jinping asumió el liderazgo del gigante asiático, en el pasado mes de marzo. Su viaje incluye una escala en Shanghai. Las agencias AFP y EFE reseñan que durante su estancia en Beijing, podrían anunciarse algunos acuerdos comerciales como la venta de aviones Airbus a compañías áreas chinas, así como inversiones en territorio chino de la firma nuclear francesa Areva. Por su parte, la agencia Xinhua destacó que Beijing también tiene intereses en proyectos vinculados a materias como la protección medioambiental, ciencia, tecnología y educación. Otro posible acuerdo gira en torno a a la industria automotriz Renault, que planea abrir nuevas fábricas en suelo chino, país que ha arrebatado en los últimos años a Estados Unidos la condición de “mayor mercado de la automoción”. En términos generales, Hollande busca apuntalar las relaciones comerciales con China, un país con el que la balanza comercial es deficitaria para Francia en más de dos mil millones de euros (más de dos mil 600 millones de dólares), y convertir al mercado del gigante asiático en una válvula de oxígeno a las dificultades económicas. En cambio, Beijing aspira que la visita “aumente la confianza mutua, profundice la cooperación pragmática, incremente la comunicación en asuntos internacionales y eleve las relaciones bilaterales a un nuevo nivel", expresó la portavoz de Asuntos Exteriores Hua Chunying. La funcionario recordó que Francia fue uno de los primeros gobiernos occidentales que reconoció el régimen comunista, en 1964, y que el cincuentenario de los lazos será celebrado con grandes fastos en China el próximo año. China y Francia son miembros permanentes con derecho a veto en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, por lo que no se descarta que conversen sobre las actuales tensiones que se viven en el panorama internacional, incluidas las cuestiones en Irán, Siria y Corea del Norte.

Hollande arribó a China para revisar y fortalecer relaciones comerciales

Presidente francés revisará las relaciones bilaterales con el país asiático (Foto: Archivo)
El presidente de Francia, Francois Hollande, arribó este jueves a la ciudad de Beijing, en el marco de una visita oficial de dos días que realiza a la nación asiática, durante la cual espera sostener un encuentro privado con su homólogo chino, Xi Jinping, además de revisar las relaciones bilaterales y cerrar vitales acuerdos en sectores como el aeronáutico o el nuclear.
La Cancillería francesa detalló que Hollande viaja acompañado por una comitiva que integra parte de su Gabinete Ejecutivo -especialmente las carteras económicas y financieras- y representantes de al menos 50 grandes compañías francesas, lo que advierte del carácter eminentemente comercial del viaje.
Además de la reunión con Jinping, también tiene previsto conversar con el primer ministro, Li Kegiang, y con el presidente del Comité Permanente de la Asamblea Popular Nacional, Zhang Dejiang, sobre asuntos internacionales y regionales de interés común, como por ejemplo la crisis económica en el continente europeo.
Con esta visita de aproximadamente 37 horas, Hollande se convierte en el primer mandatario occidental que viaja a China desde que Xi Jinping asumió el liderazgo del gigante asiático, en el pasado mes de marzo. Su viaje incluye una escala en Shanghai.
Las agencias AFP y EFE reseñan que durante su estancia en Beijing, podrían anunciarse algunos acuerdos comerciales como la venta de aviones Airbus a compañías áreas chinas, así como inversiones en territorio chino de la firma nuclear francesa Areva.
Por su parte, la agencia Xinhua destacó que Beijing también tiene intereses en proyectos vinculados a materias como la protección medioambiental, ciencia, tecnología y educación.
Otro posible acuerdo gira en torno a a la industria automotriz Renault, que planea abrir nuevas fábricas en suelo chino, país que ha arrebatado en los últimos años a Estados Unidos la condición de “mayor mercado de la automoción”.
En términos generales, Hollande busca apuntalar las relaciones comerciales con China, un país con el que la balanza comercial es deficitaria para Francia en más de dos mil millones de euros (más de dos mil 600 millones de dólares), y convertir al mercado del gigante asiático en una válvula de oxígeno a las dificultades económicas.
En cambio, Beijing aspira que la visita “aumente la confianza mutua, profundice la cooperación pragmática, incremente la comunicación en asuntos internacionales y eleve las relaciones bilaterales a un nuevo nivel", expresó la portavoz de Asuntos Exteriores Hua Chunying.
La funcionario recordó que Francia fue uno de los primeros gobiernos occidentales que reconoció el régimen comunista, en 1964, y que el cincuentenario de los lazos será celebrado con grandes fastos en China el próximo año.
China y Francia son miembros permanentes con derecho a veto en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, por lo que no se descarta que conversen sobre las actuales tensiones que se viven en el panorama internacional, incluidas las cuestiones en Irán, Siria y Corea del Norte.
Presidente francés revisará las relaciones bilaterales con el país asiático (Foto: Archivo)
El presidente de Francia, Francois Hollande, arribó este jueves a la ciudad de Beijing, en el marco de una visita oficial de dos días que realiza a la nación asiática, durante la cual espera sostener un encuentro privado con su homólogo chino, Xi Jinping, además de revisar las relaciones bilaterales y cerrar vitales acuerdos en sectores como el aeronáutico o el nuclear.
La Cancillería francesa detalló que Hollande viaja acompañado por una comitiva que integra parte de su Gabinete Ejecutivo -especialmente las carteras económicas y financieras- y representantes de al menos 50 grandes compañías francesas, lo que advierte del carácter eminentemente comercial del viaje.
Además de la reunión con Jinping, también tiene previsto conversar con el primer ministro, Li Kegiang, y con el presidente del Comité Permanente de la Asamblea Popular Nacional, Zhang Dejiang, sobre asuntos internacionales y regionales de interés común, como por ejemplo la crisis económica en el continente europeo.


Con esta visita de aproximadamente 37 horas, Hollande se convierte en el primer mandatario occidental que viaja a China desde que Xi Jinping asumió el liderazgo del gigante asiático, en el pasado mes de marzo. Su viaje incluye una escala en Shanghai.
Las agencias AFP y EFE reseñan que durante su estancia en Beijing, podrían anunciarse algunos acuerdos comerciales como la venta de aviones Airbus a compañías áreas chinas, así como inversiones en territorio chino de la firma nuclear francesa Areva.
Por su parte, la agencia Xinhua destacó que Beijing también tiene intereses en proyectos vinculados a materias como la protección medioambiental, ciencia, tecnología y educación.
Otro posible acuerdo gira en torno a a la industria automotriz Renault, que planea abrir nuevas fábricas en suelo chino, país que ha arrebatado en los últimos años a Estados Unidos la condición de “mayor mercado de la automoción”.
En términos generales, Hollande busca apuntalar las relaciones comerciales con China, un país con el que la balanza comercial es deficitaria para Francia en más de dos mil millones de euros (más de dos mil 600 millones de dólares), y convertir al mercado del gigante asiático en una válvula de oxígeno a las dificultades económicas.
En cambio, Beijing aspira que la visita “aumente la confianza mutua, profundice la cooperación pragmática, incremente la comunicación en asuntos internacionales y eleve las relaciones bilaterales a un nuevo nivel", expresó la portavoz de Asuntos Exteriores Hua Chunying.
La funcionario recordó que Francia fue uno de los primeros gobiernos occidentales que reconoció el régimen comunista, en 1964, y que el cincuentenario de los lazos será celebrado con grandes fastos en China el próximo año.
China y Francia son miembros permanentes con derecho a veto en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, por lo que no se descarta que conversen sobre las actuales tensiones que se viven en el panorama internacional, incluidas las cuestiones en Irán, Siria y Corea del Norte.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario