Por Dr. Ali Chegeni *
La
Habana, 21 jun (PL) Las elecciones celebradas el 14 de junio de 2013 en
la República Islámica de Irán, con una participación del 72,7 % del
pueblo revolucionario y culto persa, resultaron en la elección de una
figura revolucionaria, con sentados precedentes y muy conocida en las
diferentes esferas del país, tales como el poder legislativo, ejecutivo
y en todo lo concerniente a la toma de decisiones tras el triunfo de la
Revolución Islámica en el año 1979, el excelentísimo Doctor
Hojatoleslam Hassan Rouhani, lo cual ha captado aún más la atención del
mundo dada la gloria, grandeza y eficacia de la democracia religiosa
imperante en la República Islámica de Irán.
Un acercamiento a las particularidades de estas elecciones, ayudará a
los respetados lectores en el análisis de la situación y su repercusión.
Asimismo, contribuirá a una mayor comprensión del sistema de democracia
religiosa de la República Islámica de Irán.
1. La asistencia
masiva a las urnas de todas las corrientes y puntos de vista del pueblo
persa ratifica, por sobre todas las cosas, el voto decisivo del pueblo
iraní por la esencia del sistema de la República Islámica de Irán, a la
vez que es una muestra del apoyo y la fidelidad a su Revolución.
2.
Las
mencionadas elecciones, celebradas en un clima de precisión, salud,
seguridad y transparencia, en la extensa República Islámica de Irán,
representaron otra página dorada para orgullo del sistema de la
República Islámica de Irán en lo relativo a la institucionalización del
la democracia religiosa en todas las aristas de la sociedad.
3.
La
mayoría del pueblo dio su voto decisivo al presidente, Doctor Hassan
Rouhani, a pesar de toda la publicidad negativa de los enemigos para
debilitar la asistencia del pueblo a los comicios, así como de los
falsos reclamos de sus instituciones manipuladoras de las noticias,
insinuando falta de libertad y democracia de las elecciones de la
República Islámica de Irán. Este es un tema que incluso los opositores y
enemigos jurados del pueblo revolucionario y civilizador de Irán, a
pesar de ir en contra de su imagen aparente, se vieron obligados a
reconocer.
4.
La atmósfera de las elecciones en la
República Islámica de Irán fue de transparencia, competitividad y
justicia para todos los candidatos participantes y existió para cada uno
de ellos la posibilidad del uso por igual de todos los recursos, como
la radio y la televisión, para hacer llegar la información al pueblo y
difundir los programas de su posible gobierno.
La citada
atmósfera, no tuvo indicio alguno de mala conducta o destrucción
de un candidato por parte de otro. Reinó un ambiente de competencia
constructiva y amigable dentro de los marcos legales, de forma
saludable y segura.
5.
El mensaje que deja al mundo las
elecciones de la República Islámica de Irán es un mensaje de paz,
amistad, justicia y respeto mutuo, sobre la base del respeto a los
derechos de todos los seres humanos. Estas elecciones, tal y como
expresó el presidente electo en su mensaje, son una nueva muestra de las
intenciones de la República Islámica de Irán de establecer relaciones
saludables, de igualdad, sobre la base del respeto mutuo y sin
interferencia en los asuntos internos de los demás, con todos los
países del mundo.
6.
El próximo gobierno dará
continuidad, con fuerza y energías renovadas, al camino trazado por el
actual gobierno en todas las áreas, incluyendo todos los programas
fundamentales de la República Islámica de Irán.
7.
Tal y
como expresara el presidente electo de la República Islámica de Irán en
su primera rueda de prensa, las relaciones de la República Islámica de
Irán con todos los países y especialmente con los países vecinos y los
países amigos y revolucionarios en todas las partes del mundo, y en
particular en la región de América Latina, avanzarán con mayor optimismo
y agilidad.
* Embajador de la República Islámica de Irán en Cuba
leg/ac |
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