lunes, 23 de mayo de 2016

Una propuesta práctica para imprimirle a nuestras prácticas una dinámica global y revolucionaria

Una propuesta práctica para imprimirle a nuestras prácticas una dinámica global y revolucionaria


Texto enviado al encuentro libertario la Apuesta Directa
I ) Necesidad un exhaustivo análisis de nuestra sociedad:
Una de las dificultades que tenemos a la hora de efectuar un análisis correcto y global de la sociedad que nos ha tocado vivir es la de ver al pasado con lentes del presente y que, a la inversa analicemos el presente con herramientas del pasado.
Lo más patente de esta afirmación es el análisis del Capitalismo, de su aparición, recorrido y presente, como siendo una evolución natural de las sociedades humanas. Conviene desmentir rotundamente esta afirmación porque nos aboca al fatalismo y la inhibición de la acción. Y lo mejor para desmentirlo es ir a la raíz, y entonces logramos discernir su verdadera naturaleza intrínsecamente depredadora, desde su mismísimo nacimiento, un nacimiento en un lugar y un tiempo muy determinados, rompiendo con las sociedades pre-capitalistas en el mundo entero. Dándole a la dominación una estructura de poder de reproducción automática y sistemática jamás visto en la historia. Lo mismo sucede con el Estado, considerado generalmente como una estructura de dominio autónoma, cuando un estudio del nacimiento del Capitalismo nos indica por el contrario que el Estado-nación surge como condición tanto para su pervivencia como para su desarrollo. Otro error consiste por ejemplo en creer que el Capitalismo son “ellos”, los explotadores, sin que “nosotrxs”, el 99% (otro error) como enemigos de clase, nos veamos “manchadxs” y que con una lucha de clases eficaz, nos libraríamos del capitalismo.
II) Las Estrategias erróneas dependen de un análisis truncado
Con este último y equivocado análisis, es lógico que al sindicalismo le otorguemos una visión estratégica para derrocar al capitalismo. Lo mismo sucede con aquellos que ven en el Estado una estructura política de dominio separada, autónoma respecto al capitalismo. Muchas personas inquietas tratarán de asaltarlo por las urnas, para proteger a lxs explotadxs e incluso conseguir un Estado socialista, véase eco-socialista.
Pero en realidad es un oxímoron. Sobre todo sabiendo que el Estado no tiene otra razón de ser que la de mantener las relaciones de producción (mantener el papel de cada cual) para el Capital y de dinamizarlo. Que no pueden existir el uno si el otro y que nunca se podrá pues oponer al Capitalismo sin suicidarse. Todo y como el Capitalismo no puede dejar de reproducirse y llevarnos muy pronto a un colapso energético y ecológico además del aparcamiento de millones personas que ya no sirven para su reproducción, debido a una tecno-ciencia cada vez más eficiente. Sin embargo ante esta destrucción masiva el tiempo apremia y no podemos esperar a que el gigante con pies de barro, se hunda porque lo que dejaría sería tal vez peor todavía.
III) Nuestras carencias y nuestras ventajas
Nuestra primera carencia (y tenemos muchas más, pero no viene ahora a propósito) es nuestra soberbia que nos hace pensar que no somos parte del Capitalismo por ser un poco más conscientes que la gran mayoría de personas. Esto se traduce entre otros por el fenómeno “identitario” que nos afecta a todxs y que cumple con una función básica de la naturaleza humana, y que es la de pertenecer a una comunidad humana. Pero como destruir a la comunidad ha sido el primer paso del Capitalismo, esa función ha sido desviada por él de forma que nos integremos en sus categorías. Así somos de Coca-Cola, del Barça, como somos Españoles o bien hombres, mujeres, electricistas o bien ecologistas, anarquistas o socialistas, Somos anarco-sindicalistas de tal agrupación o de tal otra. Con lo cual estamos fragmentadxs todxs, lo que impide una visión global y una actuación en consecuencia.
Y sin embargo tenemos valiosas asociaciones que actúan en multitud de aspectos de la vida tanto de lucha para defendernos de los atropellos del Capital, como en formas alternativas para proponer en lo concreto como podríamos volver a crear un mundo comunitario más humano y sin el consumismo y despilfarros impuestos sin que merme nuestra felicidad, sino todo lo contrario.
IV) El Municipalismo Libertario, algo más que una teoría, una práctica política auto reflexiva de federación de lo social
La política actualmente es un gran circo que nos presenta el propio Capital para que cambiemos las cosas pero sin cambiarlas por el asalto al Estado gracias al más mediatizado juego de masas: el de las urnas. Con lo cual cuesta pensar en un concepto diferente del campo político.
El municipalismo libertario sin embargo, propone una visión opuesta, una democracia directa que se iría formando, como un doble poder, no un poder jerárquico de dominio, sino un poder de crear, de decidir, un poder horizontal y compartido, incentivando, dándole visibilidad en las plazas públicas y federando a los movimientos sociales de oposición al capitalismo como también a las alternativas sociales. Se trata de que poco a poco todas estas fuerzas, sin perder su especificidad, todas estas entidades, pierdan su mentalidad de vanguardia, de repliegue en si mismas y salgan a la luz para exponerse al debate público de las asambleas municipales decisivas en una democracia directa y cargos revocables elegidos por sorteo y para funciones concretas.
Poco a poco este doble poder, a la vez contra poder y poder paralelo, iría creando sus propias instituciones y su propia cultura, proponiendo a la vez unas formas concretas, ya no solamente defensivas sino también ofensivas, al desarrollar indispensables, actividades vitales, respondiendo así a las necesidades básicas de las personas, todo y evitando retro-alimentar al capital con el dinero. Más que a una socialización, para más claridad hablamos de municipalización de los medios de producción , des-economizando a la sociedad y tanto el consumo como la producción en sus formas, cualidades y cantidades, serían decisión de lxs ciudadanxs. Así, carcomiendo al sistema mortífero, por todos los costados ( y no solo en un aspecto reductor: lo político o en lo social o en lo económico, etc...) puede que con poco que le empujemos se venga abajo porque viviéndolo, como comunidad, es como estaremos convencidxs muchas personas que este es el camino hacía la vida. Al Estado oponemos el federalismo, tanto local como territorialmente y el Confederalismo para cumplir funciones internacionales.
Claro que las cosas no se harán del día a la mañana y que nos tendremos que proteger de los peligros como el localismo o las recuperaciones como las más peligrosas, esasque se asemejan en apariencia y que no son más que una alternativa para que perdure el sistema. Pero no intentarlo sería por nuestra parte, una inconsecuencia que no nos podemos permitir.
Tenemos también que enarbolar con firmeza nuestra manera de ver ese otro mundo posible, eso es volver a crear un paradigma esperanzador con nuestras prácticas unidas a las de los demás pueblos como de Chiapas y Rojava, que nos arrebataron los socialistas de mala cuña con sus estrepitosos fracasos por una parte y la “inteligentsia” de la filosofía posmoderna al servicio del capital. Un mundo donde quepan muchos mundos.
Floreal Romero, por el grupo promotor de los Encuentros Internacionales de la Ecología Social,
27, 28 y 29 de mayo del 2016 – Lyon, Francia.

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