Cristina Kirchner durante su entrevista en la redacción de Infobae (Adrián Escandar)
En vísperas del comienzo oficial de la campaña todos se preparan para un escenario de ultra-polarización.
La irrupción en las pantallas, en vivo y en directo, de la imagen de Cristina Kirchner desde los estudios de Infobae en la tarde del jueves marcó un anticipado y dramático comienzo de la disputa electoral.
Huyendo del fuego amigo, Cristina se expuso sin red con el objetivo de imponer su agenda luego del revolcón al que la sometieron sus "ex empleados", ahora soldados de otra causa. Durante algo más de dos horas volvió a mostrarse tal cual es, con sus más y sus menos.
La audaz propuesta de convocar al "voto útil" a favor de la Unidad Ciudadana que ella misma creó y lidera, le valió una verdadera andanada de sinceridades con la que, tanto Florencio Randazzo como Sergio Massa, dieron demoledora respuesta a la carta abierta en la que Cristina invitaba a reconocerla como la única alternativa frente al "Gran Ajuste" que según ella prepara el Gobierno.
La ex Presidente, que se fue del PJ para no competir en internas con ninguno de los suyos, se presentó para convocar a las "sensibilidades opositoras" a acompañarla con el voto unificando el espanto anti-Macri. La iniciativa funcionó como una suerte de boomerang devastador. La idea no rebotó, sino que impactó duro contra una pared de cemento armado.
Los que salieron a contestarle lo hicieron sin prurito ni pudor alguno. De todo menos bonita. El más directo fue Florencio Randazzo: "No hay que mentirle a la gente, Cristina" le descerrajó. " Macri y vos juegan el mismo juego", agregó usando un provocador y público tuteo.
El juego al que el ex ministro hace referencia es el de la polarización. En eso no parece equivocarse. El escenario post-PASO solo augura más de lo mismo.
"El diálogo con quienes nos dividieron no es posible", fue la respuesta de Massa. El hombre de Tigre soporta el embate por izquierda y por derecha sobre sus seguidores. Sus votantes son hoy un oscuro y codiciado objeto de deseo. Sostener el magro 14.9 % obtenido en las primarias obliga, a los candidatos de 1País, a una intensa agenda política peleando palmo a palmo en el territorio.
Acostumbrados a tener que remontar la adversidad electoral salen a la cancha tratando de recordarle a la gente que no se va por un ballotage sino que se eligen legisladores. Para los que insisten en transitar por la avenida del medio, la expectativa quedó reducida a sumar diputados. Hay plena conciencia de que la idea de expresar a los "indignados" no les funcionó. Tienen que recalcular estrategias.
Quién también elevó su pronunciamiento al ciberespacio fue el presidente del PJ Nacional José Luis Gioja. En una "Carta Abierta al pueblo peronista" llama a votar por la Unidad Ciudadana, con el argumento de que no hay que hacerle el juego al adversario. Más leña para la hoguera de la ultra polarización.
El oficialismo se prepara para una decidida nacionalización de la campaña que empieza este domingo. Con el convencimiento de que ese escenario le permitirá crecer entre 4 y 5 puntos, alimentan las expectativas la imagen positiva de Mauricio Macri como efecto del resultado de agosto. Evitarán confrontar con las gobernadores, buscarán esquivar la provincialización de los debates. La opción es Mauricio o Cristina.
En la mesa de arena de la marca Cambiemos, las apariciones pública de la ex presidente son evaluadas como "pura ganancia". Según esta mirada, las últimas movidas de Cristina consolidan solo el núcleo duro K. Creen que la líder de UC sigue cazando en el zoológico sin sumar un solo voto fresco.
En la Provincia, en cambio, reina la prudencia.  Nadie tira manteca al techo. Desde el comando de campaña de María Eugenia Vidal se avizora un escenario de paridad. Con una levísima diferencia a favor de Esteban Bullrich, siempre dentro del margen de error, la consigna es no bajar la guardia.
La expectativa por despegarse está puesta en los votos de 1País. Considerados como los más volátiles del conjunto, se espera que de cada 10 que voluntades que opten por desplazarse hacia una opción efectiva, 7 irán hacia el lado de Cambiemos y no más de 3, llegado el caso, hacia la Unidad Ciudadana. Por el contrario, se espera poco o nada, de los votantes de Cumplir.
Sumar voluntades por el lado de los que no fueron a votar y son alrededor de 600.000 también genera expectativas. Los que quedaron "sueltos", fuerzas que no llegaron al porcentaje que les permite competir, no generan ilusión en el oficialismo provincial. Se trata de votos de izquierda que podrían sumarse a CFK.
El randazzismo prefiere apostar al "voto semilla". Sin mayores chances que las de llevar uno o dos diputados harán valer propuestas y valores para retener el magro 5,9 que obtuvieron en agosto. Eduardo "Balli" Bucca ganará protagonismo siempre al lado de Florencio. Tiene solo 38 años. Cero ansiedad. Tiempo al tiempo.
La mirada está puesta en el día después, que es cuando, ellos creen, comenzará un inexorable ocaso político para Cristina. A partir de ese momento esperan ver brotar las germinaciones templadas al calor de intendentes y gobernadores que, aseguran, cuando haya pasado octubre dejarán de moverse por conveniencias electorales y abandonando posiciones oportunistas comenzarán para pasarle factura a Cristina
Ese caso tampoco los moverá el amor, solo el espanto.