Reforma en telecomunicaciones. Lo que se discute y hay que saber
Para entender un poco lo que discutirá la Cámara de Diputados esta semana y que será tema de discusión en los siguientes días
En la pasada semana, fue presentada una minuta que
contiene las posibles y esperadas reformas a la Ley de
Telecomunicaciones en México; un tema de relevancia que todo mexicano
debe conocer.
La iniciativa signada por el presidente de la República, Enrique Peña Nieto, los partidos PRI, PAN, PRD y PVEM así como los líderes de cada bancada del Congreso, ya se encuentra en la Cámara de Diputados donde ya pasó su primer filtro, con la aprobación en lo general y particular de la Comisión de Puntos Constitucionales. Lo que prevé que pueda ser aprobada en el Pleno camaral el siguiente jueves.
Desde su presentación, esta iniciativa fue recibida con buena cara tanto por partidos políticos, como por empresas privadas, aunque hay voces de la sociedad civil e incluso empresariales que piden más definición sabedores de que la democratización del sistema de medios de comunicación necesita nuevas leyes y reformas constitucionales.
Pero, ¿qué es la reforma a telecomunicaciones? Puede ser más fácil entenderla de lo que parece.
Con esta minuta se busca primordialmente regular y mejorar las concesiones de televisión, radio y banda ancha para acelerar la competencia en el servicio de telefonía móvil, fija, televisión de paga y banda ancha por un lado y por el otro abrir nuevas concesiones. Lo que conlleve a cobertura universal, mejorar costos para los mexicanos y tener mayor calidad en servicio y contenidos.
Esto quiere decir, que se busca que haya una mayor oferta de canales de televisión, estaciones de radio y más empresas las administren. A fin de reducir prácticas moopólicas, es decir, que más empresas ofrezcan los servicios de televisión de paga y telefonía celular e internet.
Con la reforma, señalan, se precisarán los lineamientos para licitar las dos nuevas concesiones de televisión anunciadas desde el mandato del presidente Felipe Calderón, en las cuales no podrán concursar las empresas que ya cuentan con concesiones de 12 MHz en la frecuencia televisiva, lo que abre la posibilidad a que sean nuevas empresas quienes peleen por tener la nueva señal. Y deja fuera a las gigantes Televisa y TV Azteca.
Además plantea abrir un canal de TV para uso exclusivo del gobierno federal, al que hasta ahora se ha llamado Canal del Estado.
En materia de telefonía la reforma prevé que se comparta la infraestructura con que cuenta Teléfonos de México (Telmex), antiguamente paraestatal y que fuera vendida a Carlos Slim en el sexenio de Carlos Salinas de Gortari, para que otras firmas puedan ofrecer el servicio de telefonía de calidad a un costo que pueda ser competitivo con la que actualmente ocupa el mayor espectro.
Por otra parte, pretende que se desincorporen parte de los grandes capitales de estas empresas como activos para que la competencia sea más justa.
Entre las novedades de la reforma presentada y signada en el marco del Pacto por México plantea abrir al 100% a la inversión extranjera la administración de las telecomunicaciones, es decir, que empresas privadas de otros países puedan ofrecer servicios se telefonía y telecomunicaciones vía satélite y hasta 49% en radio y televisión.
Uno de los puntos que genera resquemor en esta nueva propuesta legislativa entre los empresarios es la creación de Instituto Federal de Telecomunicaciones como un órgano autónomo que reuniría los hasta ahora dos órganos reguladores existentes Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel) y Comisión Federal de Competencia (Cofeco) y grandes atribuciones.
Este organismo será el encargado de la regulación por la vía legal de las actividades que desarrollen las empresas que administran servicios de telecomunicaciones; por lo que deberá observar las prácticas de las corporaciones y en su momento sancionar las anomalías que se presenten. Y tendrá a su cargo una banda de 700 Megahertz en los que se puede hacer transmisión de voz, datos y ondas radiales para el uso de algún operador que lo requiera.
En la iniciativa se declararon tres ejes rectores para su promulgación, mismo que son:
En el ámbito político se debe entender que esta es una propuesta de procedencia multipartidista, pue proviene del Pacto Por México, una alianza política que está integrada por los partidos Revolucionario Institucional (PRI), Acción Nacional (PAN), Revolución Democrática (PRD) y Verde Ecologista de México (PVEM).
Sin duda, la reforma a las telecomunicaciones dará mucho de qué hablar en las próximas semanas. Si esta semana es aprobada en el Pleno de San Lázaro, será turnada al Senado para su última ratificación y posterior publicación.
Aquí el paso a paso de la presentación de esta reforma y las reacciones de las distintas voces.
La iniciativa signada por el presidente de la República, Enrique Peña Nieto, los partidos PRI, PAN, PRD y PVEM así como los líderes de cada bancada del Congreso, ya se encuentra en la Cámara de Diputados donde ya pasó su primer filtro, con la aprobación en lo general y particular de la Comisión de Puntos Constitucionales. Lo que prevé que pueda ser aprobada en el Pleno camaral el siguiente jueves.
Desde su presentación, esta iniciativa fue recibida con buena cara tanto por partidos políticos, como por empresas privadas, aunque hay voces de la sociedad civil e incluso empresariales que piden más definición sabedores de que la democratización del sistema de medios de comunicación necesita nuevas leyes y reformas constitucionales.
Pero, ¿qué es la reforma a telecomunicaciones? Puede ser más fácil entenderla de lo que parece.
Con esta minuta se busca primordialmente regular y mejorar las concesiones de televisión, radio y banda ancha para acelerar la competencia en el servicio de telefonía móvil, fija, televisión de paga y banda ancha por un lado y por el otro abrir nuevas concesiones. Lo que conlleve a cobertura universal, mejorar costos para los mexicanos y tener mayor calidad en servicio y contenidos.
Esto quiere decir, que se busca que haya una mayor oferta de canales de televisión, estaciones de radio y más empresas las administren. A fin de reducir prácticas moopólicas, es decir, que más empresas ofrezcan los servicios de televisión de paga y telefonía celular e internet.
Con la reforma, señalan, se precisarán los lineamientos para licitar las dos nuevas concesiones de televisión anunciadas desde el mandato del presidente Felipe Calderón, en las cuales no podrán concursar las empresas que ya cuentan con concesiones de 12 MHz en la frecuencia televisiva, lo que abre la posibilidad a que sean nuevas empresas quienes peleen por tener la nueva señal. Y deja fuera a las gigantes Televisa y TV Azteca.
Además plantea abrir un canal de TV para uso exclusivo del gobierno federal, al que hasta ahora se ha llamado Canal del Estado.
En materia de telefonía la reforma prevé que se comparta la infraestructura con que cuenta Teléfonos de México (Telmex), antiguamente paraestatal y que fuera vendida a Carlos Slim en el sexenio de Carlos Salinas de Gortari, para que otras firmas puedan ofrecer el servicio de telefonía de calidad a un costo que pueda ser competitivo con la que actualmente ocupa el mayor espectro.
Por otra parte, pretende que se desincorporen parte de los grandes capitales de estas empresas como activos para que la competencia sea más justa.
Entre las novedades de la reforma presentada y signada en el marco del Pacto por México plantea abrir al 100% a la inversión extranjera la administración de las telecomunicaciones, es decir, que empresas privadas de otros países puedan ofrecer servicios se telefonía y telecomunicaciones vía satélite y hasta 49% en radio y televisión.
Uno de los puntos que genera resquemor en esta nueva propuesta legislativa entre los empresarios es la creación de Instituto Federal de Telecomunicaciones como un órgano autónomo que reuniría los hasta ahora dos órganos reguladores existentes Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel) y Comisión Federal de Competencia (Cofeco) y grandes atribuciones.
Este organismo será el encargado de la regulación por la vía legal de las actividades que desarrollen las empresas que administran servicios de telecomunicaciones; por lo que deberá observar las prácticas de las corporaciones y en su momento sancionar las anomalías que se presenten. Y tendrá a su cargo una banda de 700 Megahertz en los que se puede hacer transmisión de voz, datos y ondas radiales para el uso de algún operador que lo requiera.
En la iniciativa se declararon tres ejes rectores para su promulgación, mismo que son:
- Ampliación de derechos. Libertades de expresión, difusión, acceso a la información y a las tecnologías de la comunicación, incluyendo la banda ancha.
- Nueva arquitectura legal. Con el nuevo Instituto Federal de Telecomunicaciones, el Ejecutivo federal ya no será el encargado de otorgar ni revocar las concesiones, con lo cual se garantiza que las decisiones serán técnicas y no políticas.
- Competencia. Se tomarán medidas específicas para acelerar la competencia en las telecomunicaciones y la radiodifusión, con el objetivo de liberar en el menor tiempo posible el potencial del sector.
En el ámbito político se debe entender que esta es una propuesta de procedencia multipartidista, pue proviene del Pacto Por México, una alianza política que está integrada por los partidos Revolucionario Institucional (PRI), Acción Nacional (PAN), Revolución Democrática (PRD) y Verde Ecologista de México (PVEM).
Sin duda, la reforma a las telecomunicaciones dará mucho de qué hablar en las próximas semanas. Si esta semana es aprobada en el Pleno de San Lázaro, será turnada al Senado para su última ratificación y posterior publicación.
Aquí el paso a paso de la presentación de esta reforma y las reacciones de las distintas voces.
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