La conferencia de Ginebra debe celebrarse sin condiciones preliminares
Foto: RIAN
Serguéi Lavrov
(La Voz de Rusia) tachó semejantes informaciones de rumores y provocaciones. En la
conferencia de prensa ofrecida este viernes el jefe de la diplomacia
rusa se refirió asimismo a los esfuerzos conjuntos con EEUU para el
arreglo de la crisis en Siria. Los actores internos impiden obtener
resultados positivos, subrayó Lavrov. El canciller piensa discutir éstas
y otras cuestiones con su par estadounidense la semana que viene
durante la cumbre ministerial del Foro Regional de la Asociación de
Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) en Brunei.
Tal
como se esperaba la cuestión siria fue el tema central de la conferencia
de prensa ofrecida el viernes en la Cancillería rusa. Sobre el telón de
fondo de las informaciones sobre el posible cierre de la Embajada rusa
en Damasco y de la base en Tartus, incluso no se hizo una sola pregunta
sobre Edward Snowden. La información sobre la retirada de Rusia de Siria
fue difundida a principios de semana por el británico The Guardian.
El periódico también daba la fecha exacta (1 de julio) del cierre de la
legación diplomática. El máximo diplomático ruso manifestó que son
todos rumores: los diplomáticos y los trabajadores de la base siguen
trabajando como lo hacen habitualmente:
—Son
todos rumores, especulaciones y provocaciones con el fin, por lo visto,
de preparar el terreno para la percepción por la opinión pública de los
esfuerzos que se hacen para sustituir el régimen. Nuestra embajada
funciona como de costumbre, cumpliendo las tareas pertinentes a una
misión diplomática, aunque, claro está, lo hace en condiciones muy
peligrosas. Asimismo funciona el punto de asistencia material y técnica
de la flota rusa en Tartus. Nada se dice de una evacuación del punto ni
de su personal. Hace ya mucho tiempo que el punto cuenta con la
asistencia de personal exclusivamente civil, que hace todo lo posible
para que funcione.
Otro tema sirio candente son
los suministros de armas a los extremistas sirios, incluyendo la
información sobre las intenciones de EEUU de iniciar el envío de
armamento de tránsito a través de Jordania. Las informaciones
aparecieron al cabo de una semana de la relevante cumbre del G-8 y en
vísperas de las conversaciones entre Lavrov y Kerry.
El ministro ruso dijo que los posibles suministros de armas a la
oposición vulnerarán la concepción de la convocatoria de la nueva
conferencia ginebrina:
—Cuando
promovíamos la iniciativa conjunta ruso-norteamericana subrayábamos que
la participación en la conferencia del gobierno y la oposición de Siria
debe materializarse sin condiciones preliminares. Los opositores, que
cuentan con el respaldo de Occidente y de algunos países de la región,
declararon que no viajarán a Ginebra hasta que no restablezcan el
equilibrio militar en el teatro de operaciones. Teniendo en cuenta esto
el abastecimiento de armas a la oposición implica que dicha condición
preliminar cuenta con el respaldo de Occidente y de otros países. Los
interrogantes que surgen al respecto en relación a la postura de EEUU
los discutiré con John Kerry a principios de la semana próxima.
No
se excluye que Lavrov y Kerry analicen asimismo otro tema incómodo: los
suministros de armas a los extremistas sirios, que ya se practican
desde Libia. Semejante “contrabando”, según los medios, se efectúa desde
Europa a través del Golfo Pérsico hace ya bastante tiempo. Y semejantes
casos de violación del embargo deben ser investigados en el marco de la
ONU, recalcó el ministro ruso.
Todas estas
declaraciones fueron hechas por Lavrov en la conferencia de prensa
conjunta con su homólogo marroquí Saad Dine El Otmani. Ambos
diplomáticos, al evaluar la situación, subrayaron: Moscú y Rabat abogan
por el arreglo pacífico de la situación en Siria, sin injerencia
exterior. El titular de Exteriores de Marruecos manifestó al mismo
tiempo que si Rusia y EEUU logran alcanzar un consenso, ello incidirá de
forma positiva en la situación en Siria. En respuesta Serguéi Lavrov
destacó que si todo dependiera de este factor el resultado positivo.
Pero, lamentablemente, en la situación influyen “muchos otros actores”,
cuyas intenciones pueden no coincidir absolutamente con los planes
conjuntos de Washington y Moscú.
mj/as
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