domingo, 19 de octubre de 2014

Tuiteros y otros internautas afrontan cada vez mayores riesgos: RSF

Tuiteros y otros internautas afrontan cada vez mayores riesgos: RSF

Nueve periodistas ciudadanos fueron asesinados en distintos países en 2013. Entre éstos se encuentra México, con tres casos, informa Reporteros sin Fronteras.
Casos de activistas en internet amenazados o asesinados en México
(Foto: Reporteros sin Fronteras)
La presunta muerte de la doctora María del Rosario Fuentes Rubio, a quien se le conocía como la tuitera “Miut3”, se sumaría a diversos comunicadores en Tamaulipas y México, que han sido amedrentados, censurados y asesinados en los últimos años.
De acuerdo con la organización Reporteros Sin Fronteras, los llamados “Net Citizens” trabajan cada vez con menos libertad de expresión y enfrentan cada vez mayores riesgos.
En el informe presentado en 2013 por la organización internacional, refirió que nueve internautas y periodistas ciudadanos fueron asesinados en distintos países, entre los cuales se encuentra México, con tres casos. De los 71 periodistas asesinados en 2013, el 37% trabajaba para medios impresos, el 30% para emisoras de radio, 30% también para canales de televisión y el 3% trabajaba para medios en internet. La mayoría de ellos (un 96%) eran hombres.
El diario Reforma informó que en Tamaulipas el 24 de septiembre del 2011, el cuerpo de “La Nena de Nuevo Laredo“, como se hacía llamar en redes sociales la periodista del diario Primera Hora, María Elizabeth Macías, apareció descuartizado y con un mensaje del crimen organizado en la Avenida Cristóbal Colón de esa ciudad fronteriza.
Ese mismo año, fueron hallados colgados de un puente en Nuevo Laredo, Tamaulipas, los cuerpos de dos jóvenes que habrían difundido actividades del narco a través de blogs y foros de internet.
En la mayoría de los casos los principales acusados de orquestar ataques contra quienes difunden información vía redes sociales, son grupos de la delincuencia organizada o del narcotráfico, o incluso autoridades de diferentes niveles de gobierno.
Aristegui Noticias publicó en agosto de 2012 otros casos de ciberciudadanos asesinados o amenazados.
  • En septiembre del 2012, se reportó la desaparición del popular bloguero y tuitero conocido como “el 5anto” o “Ruy Salgado“. Aunque se informó que el caso estaba en manos de sus familiares, el blog en el que difundía opiniones y noticias sobre que dejó de realizar publicaciones.
  • En septiembre del 2012, Aleph Jiménez, vocero de #Yosoy132 en Ensenada, Baja California, se escondió ante la sospecha de un ataque en su contra. Jiménez pertenece al movimiento estudiantil surgido en las redes sociales durante la campaña presidencial.
  • El 9 de noviembre del 2011 encontraron decapitado al internauta conocido como “El Rascatripas”, en Nuevo Laredo, Tamaulipas. El sujeto, de quien no se reveló su nombre, colaboraba con el sitio Nuevo Laredo en Vivo.
  • En noviembre del 2011, el portal de internet sinaloense “Riodoce.com.mx” recibió un ataque cibernético. De acuerdo con el directivo de la revista, Ismael Bojórquez Perea, la agresión vino por la información que difundía el sitio sobre el proceso judicial contra Vicente Zambada, Niebla, “el Vicentillo”.
  • El 27 de octubre del 2011 se encontró el cuerpo decapitado de María Elizabeth Macías, conocida en internet como “la nena de Laredo”, quien colaboraba en el sitio web Nuevo Laredo en Vivo, donde se reportan actividades del crimen organizado en la región.
  • En agosto del 2011, María de Jesús Bravo y Gilberto Martínez, tuiteros veracruzanos, fueron encarcelados un mes bajo los cargos de “terrorismo” y “sabotaje“, señalados por el propio gobernador del estado, Javier Duarte, de perturbar “el orden público”.
  • En agosto del 2011, el portal “Plumas Libres” de Xalapa, Veracruz, fue hackeado durante varios días; el  periodista Luis Velázquez cuestionó ¿quién encabezaba el ataque y con qué fin?
  • En agosto del 2011, el portal “E-consulta“, de Puebla, fue inhabilitado, tras una campaña que encabezó el vocero el gobernador Rafael Moreno Valle, Sergio Ramírez Robles.

(Con información de la Revista Zócalo y Reforma)

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