Cobraban miles de una escuela... que ni conocen

Cobraban miles de una escuela... que ni conocen En supuesto plantel de Belisario Domínguez, ni la ex líder magisterial ni ningún integrante del SNTE han puesto un pie ahí

Desde 1989, cuando la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Eeducación (CNTE) tomó el edificio administrativo del magisterio ubicado en Belisario Domínguez, en el Centro Histórico, y al cual se encontraban adscritos Elba Esther Gordillo, su ex yerno René Fujiwara, su ex esposo Francisco Arriola y su hija Maricruz Montelongo, con sueldos de hasta 380 mil pesos anuales, ningún integrante del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) ha puesto un “pie ahí”. “Para devengar un salario tienes que estar en el centro de trabajo y eso, ni Gordillo, ni su hija, ni su ex yerno o cualquier integrante del CEN del SNTE que señala la página de la SEP han estado ahí; además de que no es una escuela. Eso abona más a la eterna pregunta: ‘¿dónde están todos los comisionados que cobran y no trabajan?’”, indicó Francisco Bravo, líder de la sección 9 de la Coordinadora. “Un centro de trabajo es una escuela al que se le asigna el número. En el caso del inmueble de Belisario no es una escuela, ahí no se imparten clases”, reiteró. El docente destacó que anteriormente el edificio fue una sede sindical, por lo que es muy extraño que sea considerado por la Secretaría de Educación Pública (SEP) como un centro de trabajo. “Cuando nosotros llegamos estaba la gente de Carlos Jonguitud Barrios. En ese edificio se encontraba la gente de la sección 9 del DF y de la sección 36 del Estado de México, razón por la que se observa en la página de la SEP como municipio de Tlalnepantla”, explicó. Y aseguró que es parte de las prácticas fallidas de administraciones pasadas: “Es el caos que tienen con los miles de comisionados que no saben dónde están y que la mayoría son aviadores”, explicó. Catean mansión de EEG en San Diego Autoridades de Estados Unidos catearon una residencia que Elba Esther Gordillo posee en San Diego, California, el pasado viernes, confirmó Lauren Mack, vocera de la Oficina de Inmigración y Aduanas de ese país. Sin dar más detalles sobre el operativo, la funcionaria afirmó que se contaba con una orden de registro. La propiedad cateada tiene un costo de 4.7 millones de dólares y se encuentra bajo el nombre del organismo Comercializadora TTS.