I. Todo indica que Javier Duarte de Ochoa (junto a su esposa
Karime Macías) y una pandilla de funcionarios del estado de Veracruz,
quienes colaboraron con dinero a la campaña electoral de Enrique Peña,
se robaron más de 14 mil millones de pesos que se han esfumado por las
averiguaciones previas que la Procuraduría General de la República
intencionalmente integró mal, cuandode uno de los tres más importantes
accionistas de Televisa: l Peña designó en el cargo a la hermana a
señora Arely Gómez, quien casi dejó en libertad al delincuente exdesgobernador.
No fue un error la pésima integración de la averiguación para
consignarlo: fue hecha de esa manera para pagarle con favores a
Duarte-Karime lo que hicieron en favor de Peña en 2012, en la transa del
toma y daca entre la corrupta élite priísta para otorgarse impunidad.
En una entrevista hecha al actual procurador de la PGR, Felipe Muñoz
Vásquez, por el reportero Abel Barajas (Reforma, 4 de octubre
de 2018), éste asegura que la investigación del Ministerio Público
federal fue hecha con tal tortuguismo que casi no habían suficientes
datos para su consignación: “estuvo tan mal que, incluso, considera
sorpresivo que un juez haya girado las órdenes de aprehensión contra el
exmandatario”.
II. El caso de Duarte es la típica muestra del priísmo más corrupto. Y, cómo estuvo apoyando a Peña candidato presidencial con las maletas que recogía Luis Videgaray (quien acaba de anunciar que se “retira” de la política, cuando más bien se retira millonario de la burocracia peñista), y en cuya “cooperación” estuvo la maestra Elba Esther –quien terminó confrontada con Peña y por eso la encarcelaron, para que Aurelio Nuño impusiera su contrarreforma educativa de fines laborales para despedir maestros–. Por esa ayuda financiera es que Duarte gozó de protección, se le dejó huir y Peña fue a Guatemala, estando Duarte ya detenido, para llegar a un arreglo; y que por lo que estamos sabiendo, le harían un juicio a modo para que saliera libre y con la fortuna amasada. Y por eso Peña nombró a la señora Gómez en la PGR, para casi no investigarlo a grado tal que estuvo a punto de ser puesto en libertad.
III. Ratero con fuero e impunidad, Duarte de Ochoa encabeza la lista de los 13 desgobernadores priístas y panistas, que ni siquiera fueron burócratas y mucho menos políticos; sino ladrones a los que Peña tuvo el cinismo de considerar la “nueva generación” de gobernadores. Aunque sólo fueron rateros que llevaron a la arrasadora victoria del lópezobradorismo; quien prometía combatir ese mal que se había agudizado, de Carlos Salinas de Gortari a Peña, pasando por Vicente Fox y Felipe Calderón. Así que es claramente verdadera la protección que dio Peña al saqueo de Javier Duarte. Su gula no solamente era de comida (por eso estaba gordísimo), sino de robos de los que sabía Peña y nada hizo, ni siquiera en privado. Pues Duarte le había compartido una parte para la multimillonaria campaña presidencial peñista. Ahora sabemos que Arely Gómez fue solamente tapadera en un sexenio donde casi todos los colaboradores de Peña son rateros, y están a la espera de que López Obrador los meta al “perdón y olvido”.
cepedaneri@prodigy.net.mx
Miércoles, 31 de Octubre 2018
“Durante la gestión de Arely Gómez González en la Procuraduría General de la República:
“• Por primera ocasión en la historia se obtuvo una orden de aprehensión en contra de un gobernador en funciones, por el delito de delincuencia organizada.
“• Dicha orden, que es por la cual se inició el proceso en contra del exgobernador, fue otorgada a la PGR por un juez federal, previo estudio técnico jurídico.
“• Pero además del delito de delincuencia organizada, se le consignó por el delito de lavado de dinero [sic]. Ambas conductas delictivas son consideradas graves y ameritan prisión preventiva oficiosa.
“Elemento de contexto:
“• En agosto de 2018, se reclasificó la imputación inicial que era delincuencia organizada por asociación delictuosa, la cual no es considerada delito grave.”
Gómez González se desempeñó como titular de la PGR del 3 de marzo de 2015 al 25 de octubre de 2016. Actualmente, Alberto Elías Beltrán es el encargado del despacho y el responsable del expediente.
II. El caso de Duarte es la típica muestra del priísmo más corrupto. Y, cómo estuvo apoyando a Peña candidato presidencial con las maletas que recogía Luis Videgaray (quien acaba de anunciar que se “retira” de la política, cuando más bien se retira millonario de la burocracia peñista), y en cuya “cooperación” estuvo la maestra Elba Esther –quien terminó confrontada con Peña y por eso la encarcelaron, para que Aurelio Nuño impusiera su contrarreforma educativa de fines laborales para despedir maestros–. Por esa ayuda financiera es que Duarte gozó de protección, se le dejó huir y Peña fue a Guatemala, estando Duarte ya detenido, para llegar a un arreglo; y que por lo que estamos sabiendo, le harían un juicio a modo para que saliera libre y con la fortuna amasada. Y por eso Peña nombró a la señora Gómez en la PGR, para casi no investigarlo a grado tal que estuvo a punto de ser puesto en libertad.
III. Ratero con fuero e impunidad, Duarte de Ochoa encabeza la lista de los 13 desgobernadores priístas y panistas, que ni siquiera fueron burócratas y mucho menos políticos; sino ladrones a los que Peña tuvo el cinismo de considerar la “nueva generación” de gobernadores. Aunque sólo fueron rateros que llevaron a la arrasadora victoria del lópezobradorismo; quien prometía combatir ese mal que se había agudizado, de Carlos Salinas de Gortari a Peña, pasando por Vicente Fox y Felipe Calderón. Así que es claramente verdadera la protección que dio Peña al saqueo de Javier Duarte. Su gula no solamente era de comida (por eso estaba gordísimo), sino de robos de los que sabía Peña y nada hizo, ni siquiera en privado. Pues Duarte le había compartido una parte para la multimillonaria campaña presidencial peñista. Ahora sabemos que Arely Gómez fue solamente tapadera en un sexenio donde casi todos los colaboradores de Peña son rateros, y están a la espera de que López Obrador los meta al “perdón y olvido”.
cepedaneri@prodigy.net.mx
Miércoles, 31 de Octubre 2018
SFP aclara labor de Arely Gómez en caso Javier Duarte
La Secretaría de la Función Pública aclara cómo fue la integración del expediente en contra del exgobernador de Veracruz, Javier Duarte de Ochoa:“Durante la gestión de Arely Gómez González en la Procuraduría General de la República:
“• Por primera ocasión en la historia se obtuvo una orden de aprehensión en contra de un gobernador en funciones, por el delito de delincuencia organizada.
“• Dicha orden, que es por la cual se inició el proceso en contra del exgobernador, fue otorgada a la PGR por un juez federal, previo estudio técnico jurídico.
“• Pero además del delito de delincuencia organizada, se le consignó por el delito de lavado de dinero [sic]. Ambas conductas delictivas son consideradas graves y ameritan prisión preventiva oficiosa.
“Elemento de contexto:
“• En agosto de 2018, se reclasificó la imputación inicial que era delincuencia organizada por asociación delictuosa, la cual no es considerada delito grave.”
Gómez González se desempeñó como titular de la PGR del 3 de marzo de 2015 al 25 de octubre de 2016. Actualmente, Alberto Elías Beltrán es el encargado del despacho y el responsable del expediente.
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