Uruguay: deciden si ley de aborto va a referendo
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MONTEVIDEO, Uruguay (AP) -- Los uruguayos estaban convocados el
domingo a una consulta voluntaria para saber si quieren que la ley que
hace unos meses autorizó el aborto sea sometida a un referendo, para lo
cual es necesario que participe 25% del electorado.
La
consulta no tiene opciones de voto, quien entre al cuarto oscuro
encontrará una única papeleta blanca con un texto pidiendo que se someta
a referendo la ley de interrupción voluntaria del embarazo. Para que
haya referendo es necesario que unas 655.000 personas -el 25% del
electorado- introduzcan la papeleta en su sobre. De alcanzarse esa
cifra, la Corte Electoral tiene 120 días para fijar una fecha para la
consulta.
Los principales líderes de la
oposición, integrantes del Partido Nacional de centro y el Partido
Colorado de derecha, han llamado a la gente a concurrir a la consulta.
En
tanto el gobernante Frente Amplio de izquierda llamó a defender la ley,
aprobada en octubre del año con la unanimidad de sus legisladores, no
yendo a votar.
"Quiero defender la ley porque
hace casi 100 años que este tema está en debate y ese prolongado tiempo
de discusión lo pagaron muchísimas mujeres con su vida o con su
capacidad reproductiva", dijo la presidenta del Frente Amplio, Mónica
Xavier, en el sitio de internet del partido.
La campaña a favor de la consulta es llevada adelante por distintas organizaciones.
Carlos
Alvarez, representante de la Comisión Pro Derogación de la Ley de
Aborto, dijo a The Associated Press que espera que "la gente no se
pronuncie sobre el punto sino que participe de la votación y se logre un
referéndum donde el pueblo pueda definirse en forma directa sobre la
ley de aborto".
"Este es un tema que no atañe
sólo a la mujer. No nos olvidemos del concebido", un individuo
independiente que "tiene ADN, tiene órganos, por ejemplo, corazón. Y
además hay un tercero en discordia que es el padre. Esta ley no
contempla la opinión del padre" a los efectos de decidir un aborto, dijo
otro integrante de la comisión, el diputado nacionalista Pablo Abdala.
"Una
consulta popular puede otorgar más tiempo de reflexión sobre esta
medida", argumenta uno de sus avisos televisivos y radiales
protagonizados por figuras locales de los medios, el deporte y las
artes. "Este asunto no nos divide entre buenos y malos. Debe integrarnos
en una discusión franca y profunda, de la que surja una decisión que
represente lo que piensa la mayoría", añade.
En
tanto, unas 20 organizaciones feministas, sindicales y profesionales
lanzaron una campaña en contra de la consulta bajo la consigna "Yo no
voto, ¿y vos?".
La campaña publicó una lista
de 12 motivos para no votar incluyendo "porque derogar la ley es votar
en contra de la salud de las mujeres" y "volver a la práctica
clandestina del aborto".
Advierte además que
si se derogara la ley "no se evitarán los abortos. Sólo se evitarán los
servicios de salud que garanticen la seguridad de las mujeres que los
realicen".
El Ministerio de Salud no ha hecho
públicas las cifras de abortos desde que la ley entró en vigor en
diciembre pero el viceministro de Salud, Leonel Briozzo, dijo que se
estima que desde entonces se realizan entre 300 y 400 abortos legales
por mes, es decir alrededor de 4.000 al año. No existen cifras
confiables sobre la cantidad de abortos que se realizaban antes de
legalización.
"No tenemos estadísticas fiables
porque es una práctica socialmente no aceptada y hasta hace poco
criminalizada", dijo la senadora oficialista Constanza Moreira a radios
locales.
En Uruguay, que tiene una población de 3,2 millones de habitantes, hay unos 45.000 nacimientos al año, según cifras oficiales.
Según distintos sondeos los uruguayos están divididos respecto de la ley de aborto.
El
45% de los ciudadanos no piensa votar el domingo, 40% sí lo hará y 11%
probablemente irá, según una encuesta reciente de la empresa Cifra
realizada los primeros días de junio. Mientras, 46% de los uruguayos
está a favor de mantener la ley de interrupción del embarazo, 38% está
en contra y 16% no tiene opinión, agregó la encuestadora. El sondeo, que
está publicado en el sitio de Cifra, fue realizado telefónicamente a
1.008 entrevistados de todo el país y tiene un margen de error de tres
puntos porcentuales.
El Senado uruguayo aprobó
en octubre la ley que despenaliza el aborto en las primeras 12 semanas
de gestación, convirtiendo a Uruguay en el segundo país de Latinoamérica
después de Cuba en permitir el aborto libre en el primer trimestre de
embarazo.
La ley despenaliza los abortos pero
exige que las mujeres justifiquen su decisión frente a un panel de
expertos y que cumplan cinco días de reflexión antes de confirmar que
quieren continuar con el procedimiento. La justicia no tiene
intervención excepto en los casos de menores, que deben recibir el aval
de un juez.
Pasadas las 12 semanas de
gestación la ley también despenaliza los abortos cuando la vida de la
madre esté en riesgo o el feto sufra deformidades y hasta las 14 semanas
en el caso de los embarazos producto de una violación.
La
senadora oficialista y primera dama Lucía Topolansky había dicho al
votar el texto en octubre que le parecía "bien" que la ley fuera
plebiscitada y que estaba "segura" de que los uruguayos la confirmarían.
El
Parlamento uruguayo ya había aprobado una ley similar en 2008 pero el
entonces presidente Tabaré Vázquez del Frente Amplio, del mismo partido
del actual mandatario José Mujica, la anuló aplicando su derecho a veto.
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