Jodidos, pero contentos
Leo Zuckermann
La OCDE argumenta que “en la vida hay más que las cifras
del PIB y las estadísticas económicas”. Es cierto...
30/05/2013 02:31
¿Cuál es el secreto de una vida mejor? ¿Es una
buena educación, aire limpio, una casa confortable, dinero? Son
preguntas que lanza la Organización para la Cooperación y el Desarrollo
Económicos, la OCDE, en un nuevo estudio titulado Índice para una Vida
Mejor (http://www.oecdbetterlifeindex.org/es/).
La OCDE argumenta que “en la vida hay más que las cifras del PIB y las estadísticas económicas”. Es cierto. Pero, entonces, ¿cómo medir el bienestar de las sociedades? La organización en cuestión lanza una propuesta con el índice referido. Lo componen un total de once variables. Tres son de “condiciones materiales de vida”: empleo, ingresos y vivienda. Las ocho restantes son de “calidad de vida”: comunidad, educación, equilibrio laboral-personal, medio ambiente, participación ciudadana, salud, satisfacción ante la vida y seguridad. El estudio calcula el índice para los 34 países miembros de la OCDE (incluyendo México) más Brasil y Rusia.
La OCDE razona que no se puede realizar una clasificación definitiva de los 36 países medidos porque cada persona le puede dar un peso diferente a cada una de las variables arriba señaladas. Para algunos, lo más importante será tener un buen ingreso, para otros una vivienda confortable, mientras que para otros puede ser la seguridad o la educación. Sin embargo, si le damos el mismo peso a las once variables, el estudio coloca a Australia en el primer sitio de una vida mejor, seguido por Suecia, Canadá y Noruega. En el fondo de la tabla se encuentra Turquía y México en penúltimo lugar.
¿Por qué la vida de los mexicanos es peor que la de los 34 países restantes? En tres variables nos va pésimo. Comencemos con la peor de todas: la seguridad. “El 4% de las personas en los países de la OCDE afirman haber sufrido un asalto o robo durante los pasados 12 meses”. En México dicha tasa es de 13%. En cuanto a la tasa media de homicidios por cada cien mil habitantes, el promedio de la OCDE es de 2.2, mientras que en México es diez veces mayor (23.7).
La segunda variable donde estamos mal comparativamente hablando es en el ingreso: “En México, el ingreso familiar disponible neto ajustado promedio es de 12, 732 USD al año, cifra menor que el promedio de la OCDE de 23, 047 USD”. Además, “la brecha entre los más ricos y los más pobres es considerable; la población situada en el 20% superior de la escala de ingresos gana 13 veces lo que percibe la población que ocupa el 20% inferior”.
Tercera variable pésima en nuestro país es la educación: “En México, el 36% de los adultos entre 25 y 64 años han obtenido el equivalente de un título de educación secundaria, cifra mucho menor que el promedio de la OCDE de 74%”. En cuanto a la calidad educativa, en México “el estudiante en promedio obtuvo una calificación de 420 puntos en lectura, matemáticas y ciencias en el Programa para la Evaluación Internacional de Estudiantes (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE. Esta calificación es más baja que el promedio de la OCDE de 497”.
¿Cuál es la variable donde México sale relativamente bien? Se trata de dos asuntos subjetivos: la satisfacción ante la vida y la felicidad. La primera “mide la manera en que las personas evalúan, más que sus sentimientos actuales, su vida en su conjunto […] Al pedirles que calificaran su satisfacción general ante la vida en una escala del 0 al 10, las personas en la zona de la OCDE le asignaron una puntuación de 6.6”. La calificación en México fue de 7.3.
Por lo que respecta a la felicidad, “se mide como la presencia en la vida de las personas de experiencias y sentimientos positivos como el gozo y el orgullo por los logros, y la ausencia de experiencias y sentimientos negativos como el dolor, la preocupación o la tristeza”. En México “están más satisfechos con su vida que el promedio de la OCDE. El 85% de las personas dicen tener más experiencias positivas en un día normal (sentimientos de paz, satisfacción por sus logros, gozo, etcétera) que negativas (dolor, preocupación, tristeza, aburrimiento, etcétera). Esta cifra es mayor que el promedio de la OCDE de 80%”.
En conclusión: comparativamente hablando, en México se vive mal debido, sobre todo, a la inseguridad, bajos ingresos y pésima educación. Lo que nos salva es una satisfacción ante la vida y un sentimiento de felicidad cotidiana. En pocas palabras: estamos jodidos, pero contentos (en el sitio de internet referido, usted puede calcular su propio índice para una Vida Mejor y compararlo con otros).
Twitter: @leozuckermann
La OCDE argumenta que “en la vida hay más que las cifras del PIB y las estadísticas económicas”. Es cierto. Pero, entonces, ¿cómo medir el bienestar de las sociedades? La organización en cuestión lanza una propuesta con el índice referido. Lo componen un total de once variables. Tres son de “condiciones materiales de vida”: empleo, ingresos y vivienda. Las ocho restantes son de “calidad de vida”: comunidad, educación, equilibrio laboral-personal, medio ambiente, participación ciudadana, salud, satisfacción ante la vida y seguridad. El estudio calcula el índice para los 34 países miembros de la OCDE (incluyendo México) más Brasil y Rusia.
La OCDE razona que no se puede realizar una clasificación definitiva de los 36 países medidos porque cada persona le puede dar un peso diferente a cada una de las variables arriba señaladas. Para algunos, lo más importante será tener un buen ingreso, para otros una vivienda confortable, mientras que para otros puede ser la seguridad o la educación. Sin embargo, si le damos el mismo peso a las once variables, el estudio coloca a Australia en el primer sitio de una vida mejor, seguido por Suecia, Canadá y Noruega. En el fondo de la tabla se encuentra Turquía y México en penúltimo lugar.
¿Por qué la vida de los mexicanos es peor que la de los 34 países restantes? En tres variables nos va pésimo. Comencemos con la peor de todas: la seguridad. “El 4% de las personas en los países de la OCDE afirman haber sufrido un asalto o robo durante los pasados 12 meses”. En México dicha tasa es de 13%. En cuanto a la tasa media de homicidios por cada cien mil habitantes, el promedio de la OCDE es de 2.2, mientras que en México es diez veces mayor (23.7).
La segunda variable donde estamos mal comparativamente hablando es en el ingreso: “En México, el ingreso familiar disponible neto ajustado promedio es de 12, 732 USD al año, cifra menor que el promedio de la OCDE de 23, 047 USD”. Además, “la brecha entre los más ricos y los más pobres es considerable; la población situada en el 20% superior de la escala de ingresos gana 13 veces lo que percibe la población que ocupa el 20% inferior”.
Tercera variable pésima en nuestro país es la educación: “En México, el 36% de los adultos entre 25 y 64 años han obtenido el equivalente de un título de educación secundaria, cifra mucho menor que el promedio de la OCDE de 74%”. En cuanto a la calidad educativa, en México “el estudiante en promedio obtuvo una calificación de 420 puntos en lectura, matemáticas y ciencias en el Programa para la Evaluación Internacional de Estudiantes (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE. Esta calificación es más baja que el promedio de la OCDE de 497”.
¿Cuál es la variable donde México sale relativamente bien? Se trata de dos asuntos subjetivos: la satisfacción ante la vida y la felicidad. La primera “mide la manera en que las personas evalúan, más que sus sentimientos actuales, su vida en su conjunto […] Al pedirles que calificaran su satisfacción general ante la vida en una escala del 0 al 10, las personas en la zona de la OCDE le asignaron una puntuación de 6.6”. La calificación en México fue de 7.3.
Por lo que respecta a la felicidad, “se mide como la presencia en la vida de las personas de experiencias y sentimientos positivos como el gozo y el orgullo por los logros, y la ausencia de experiencias y sentimientos negativos como el dolor, la preocupación o la tristeza”. En México “están más satisfechos con su vida que el promedio de la OCDE. El 85% de las personas dicen tener más experiencias positivas en un día normal (sentimientos de paz, satisfacción por sus logros, gozo, etcétera) que negativas (dolor, preocupación, tristeza, aburrimiento, etcétera). Esta cifra es mayor que el promedio de la OCDE de 80%”.
En conclusión: comparativamente hablando, en México se vive mal debido, sobre todo, a la inseguridad, bajos ingresos y pésima educación. Lo que nos salva es una satisfacción ante la vida y un sentimiento de felicidad cotidiana. En pocas palabras: estamos jodidos, pero contentos (en el sitio de internet referido, usted puede calcular su propio índice para una Vida Mejor y compararlo con otros).
Twitter: @leozuckermann
No hay comentarios.:
Publicar un comentario