viernes, 31 de mayo de 2013

La detención del sobrino del ex gobernador Moreno Peña, una oportunidad para la verdad

La detención del sobrino del ex gobernador Moreno Peña, una oportunidad para la verdad

Manuel García @economanu jue 30 may 2013 18:16
Las cadenas no sólo pesan, también desprenden ese óxido que lo mancha todo, la sucesión de poder en Colima se ha visto encadenada a una serie de eslabones que al paso del tiempo se van tornando de una coloración oxidada de tragedia y muerte, el gobierno del estado ha pasado desde catastróficos accidentes aéreos,  inéditas anulaciones en los procesos electorales y lo peor, la sospecha de un asesinato político como el del ex gobernador Cavazos Ceballos; manchas de un óxido de poder que aparentemente tiene su secuencia de descomposición en los detalles y las diferencias que tal vez jamás resolvieron Fernando Moreno Peña y Silverio Cavazos Ceballos ambos ex mandatarios en Colima; traigo todo esto a colación, ya que recientemente se produjo la detención de un sobrino de Moreno Peña de nombre Samuel Rodríguez Moreno, por parte de la Procuraduría General de Justicia del Estado, el sobrino del ex titular del gobierno del estado, fue detenido presuntamente por estar involucrado ni más ni menos que en el asesinato del ex gobernador Cavazos.
El escándalo no para ahí ya que ahora también se señala a su tío Moreno Peña como un poderoso líder del  cártel de “La Familia Michoacana”; la razón de estas imputaciones, las demoledoras declaraciones de uno de los detenidos en el operativo conjunto con el Ejército, en el cual uno de estos personajes consignados Pedro Tirado Barajas “El Pecas”, hizo importantes  revelaciones y no tuvo empacho en mencionar también, que Samuel Rodríguez Moreno le llamaba para pedirle droga y era quien le daba las instrucciones del ex encargado del poder ejecutivo en Colima, Fernando Mendoza Chávez, según lo informó la procuraduría estatal.
A tres años de la impactante noticia en donde tres sujetos privaron de la vida a Cavazos Ceballos a consecuencia de la acción letal de poderosas armas de fuego --según se documentó en su momento--, todo indica que este terrible hecho se trató de un ajuste de cuentas con el procedimiento propio del crimen organizado, de esos tantos a los que con resignación nos hemos tenido que acostumbrar en el México violento que no exenta ni siquiera a los bellos paisajes colimenses.
Esta confusión tras el asesinato de Cavazos Ceballos parece despejarse en estos tiempos de elecciones y espero sea así en apego a la más elemental justicia, pues no es poca cosa que un familiar de un ex gobernador sea puesto a disposición de la autoridad como copartícipe de un asesinato a otro ex gobernador, curiosamente ambos del mismo partido, el Revolucionario Institucional. De no resolverse pronto este crimen, el insoportable peso de la cadena oxidada por la sospecha, sumará un nuevo eslabón, el de la impunidad que es todavía más pesada.

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