Viernes 31 de Mayo de 2013, 03:46 am
Seúl y Washington amenazan con nuevas maniobras militares a Norcorea
Los gobiernos de Corea del Sur y Estados Unidos
(EE.UU.) iniciaron este jueves nuevas maniobras militares conjuntas en
aguas de la Península coreana, alimentando así el clima de tensión que
los enfrenta a Corea del Norte, nación que considera dichos ejercicios
como una “amenaza directa” a su seguridad.
Las fuerzas combinadas participaron en un simulacro de cruce de un río en el condado de Yeoncheon, al norte de Corea del Sur, cerca de la frontera con su vecino del Norte,
Asimismo, militares de ambos países construyeron un puente temporal para trasladar sus vehículos militares, incluidos varios tanques, a través del mencionado río.
"A través del ejercicio entre Estados Unidos y Corea del Sur, pretendemos reforzar la capacidad conjunta de las tropas para cruzar un río, y maximizar el potencial de soporte de la ingeniería militar", expresó Song Bong-kyu, un alto comandante militar surcoreano.
Igualmente, resaltó que estas nuevas maniobras se realizan justo cuando Washington y Seúl conmemoran el sexagésimo aniversario de su alianza militar.
Por su parte, Pionyang condenó los ejercicios cerca de su frontera y los calificó como un “acto hostil” que amenaza su seguridad nacional, Por ello, adelantaron que podrían lanzar un ataque inmediato de represalia, si alguno de los dos países viola la frontera marítima en disputa entre las dos Coreas.
Corea del Norte también reiteró su denuncia contra Estados Unidos, país al que acusa de romper un acuerdo de paz que data desde hace 60 años entre ambas Coreas, además de dificultar los esfuerzos para firmar un nuevo tratado que traiga la estabilidad a la región asiática.
De acuerdo con Pionyang, de haberse establecido la paz antes, la disputa actual sobre la “desnuclearización de la Península Coreana no se habría convertido en un problema de primer orden” mundial.
Corea del Sur ha sido escenario de una serie de ejercicios militares, por separado o en forma conjunta, con los Estados Unidos, desde que Corea del Norte lanzó un cohete de largo alcance en diciembre de 2012.
El pasado 30 de marzo, Pioyang anunció su salida del acuerdo de armisticio de 1953 con Corea del Sur y Estados Unidos y se declaró en "estado de guerra". Semanas después, reinició las operaciones en sus instalaciones nucleares que tenía temporalmente clausuradas, incluyendo las de la planta de enriquecimiento de uranio.
Norcorea también ha dejado saber que tiene sus misiles y unidades de artillería "en posición de combate" hacia Corea del Sur, así como contra el territorio continental de EE.UU. y las bases militares del país norteamericano en el Pacífico.
El régimen de Kim Jong-un ha elevado sus amenazas contra Corea del Sur y EE.UU. desde que la ONU le impuso el pasado siete de marzo nuevas sanciones por su última prueba nuclear de febrero.
Las fuerzas combinadas participaron en un simulacro de cruce de un río en el condado de Yeoncheon, al norte de Corea del Sur, cerca de la frontera con su vecino del Norte,
Asimismo, militares de ambos países construyeron un puente temporal para trasladar sus vehículos militares, incluidos varios tanques, a través del mencionado río.
"A través del ejercicio entre Estados Unidos y Corea del Sur, pretendemos reforzar la capacidad conjunta de las tropas para cruzar un río, y maximizar el potencial de soporte de la ingeniería militar", expresó Song Bong-kyu, un alto comandante militar surcoreano.
Igualmente, resaltó que estas nuevas maniobras se realizan justo cuando Washington y Seúl conmemoran el sexagésimo aniversario de su alianza militar.
Por su parte, Pionyang condenó los ejercicios cerca de su frontera y los calificó como un “acto hostil” que amenaza su seguridad nacional, Por ello, adelantaron que podrían lanzar un ataque inmediato de represalia, si alguno de los dos países viola la frontera marítima en disputa entre las dos Coreas.
Corea del Norte también reiteró su denuncia contra Estados Unidos, país al que acusa de romper un acuerdo de paz que data desde hace 60 años entre ambas Coreas, además de dificultar los esfuerzos para firmar un nuevo tratado que traiga la estabilidad a la región asiática.
De acuerdo con Pionyang, de haberse establecido la paz antes, la disputa actual sobre la “desnuclearización de la Península Coreana no se habría convertido en un problema de primer orden” mundial.
Corea del Sur ha sido escenario de una serie de ejercicios militares, por separado o en forma conjunta, con los Estados Unidos, desde que Corea del Norte lanzó un cohete de largo alcance en diciembre de 2012.
El pasado 30 de marzo, Pioyang anunció su salida del acuerdo de armisticio de 1953 con Corea del Sur y Estados Unidos y se declaró en "estado de guerra". Semanas después, reinició las operaciones en sus instalaciones nucleares que tenía temporalmente clausuradas, incluyendo las de la planta de enriquecimiento de uranio.
Norcorea también ha dejado saber que tiene sus misiles y unidades de artillería "en posición de combate" hacia Corea del Sur, así como contra el territorio continental de EE.UU. y las bases militares del país norteamericano en el Pacífico.
El régimen de Kim Jong-un ha elevado sus amenazas contra Corea del Sur y EE.UU. desde que la ONU le impuso el pasado siete de marzo nuevas sanciones por su última prueba nuclear de febrero.