sábado, 9 de marzo de 2013

SNTE: aumento sin destino


mail:joseurena@yahoo.com José Ureña

SNTE: aumento sin destino

Este año cambiarán las negociaciones salariales para el magisterio.

Parece natural, dado el destino de su ex dirigente nacional Elba Esther Gordillo, pero hay un antecedente y otros arreglos pendientes antes de entrar en materia.

El antecedente:

En 2012 la propia Maestra presionó y hubo cambios.

Trajo a la capital a sus huestes a manifestarse y tomaron cruceros claves como Insurgentes y Paseo de la Reforma con un reclamo lógico:

-No tengo con quién negociar-, argumentó.

Era cierto.

Alonso Lujambio estaba fuera del país en su lucha perdida contra el cáncer mientras en la Ciudad de México Rodolfo Tuirán se encargaba de la SEP sin mayor cumplimiento del deber.

-Jamás me habló, ni siquiera para presentarse-, me dijo en junio la profesora Gordillo.

Felipe Calderón llamó de urgencia a José Ángel Córdova el 16 de marzo y le pidió ir de emergente a la SEP.

El 20 de abril acudió la representación sindical -Juan Díaz fue recibido por Córdova; Gordillo ni siquiera se presentó- y de ahí fueron al Salón Hispanoamericano.

Las pláticas habían iniciado, pero el desaire derivó hacia un hecho sin antecedente: ni siquiera se hizo el anunció de 4.25% de incremento.

ALIANZA CON MAESTROS, YA NO CON EL SNTE

Ahora el secretario Emilio Chuayffet lleva la ventaja.

El SNTE está disminuido, el Estado trata de recuperar la rectoría de la educación y en sus manos estará determinar aumentos y modificaciones contractuales.

Todo estará concentrado.

A ello no podrán oponerse ni Juan Díaz ni su comité.

Pero hay algo peor para ellos: antes de la negociación, en las próximas semanas, deberá decidirse el destino del SNTE y el rumbo al proceso de Elba Esther Gordillo.

En esto ellos no tendrán mayor influencia, aunque Enrique Peña busca cómo fortalecer la alianza Estado-magisterio sin simulaciones ni intermediarios.

Y si el Día del Maestro no hay anuncios oficiales, usted ya sabe por qué.

CAOS IMPERANTE EN TELEVISORAS DEL ESTADO

Muy mal se ven los medios televisivos del Estado en víspera de la iniciativa de la Ley Federal de Telecomunicaciones.

He aquí unas perlas:

1.- Entre noviembre y diciembre el Instituto Latinoamericano de Comunicación Educativa (ILCE), abastecido por el satélite Satmex 5, registró varias caídas en la señal matutina de Canal 22.

Largas, por cierto, esas fallas técnicas a causa de los equipos obsoletos y sin mantenimiento durante ocho años: de cuatro a ocho horas.

2.- Su director, el michoacano José Luis Espinoza Piña, presume haber sido ratificado cuatro años más, pero anda mal: su compañero de banca Felipe Calderón ya no es presidente de la República.

ILCE es un organismo internacional donde participan 12 países latinoamericanos, lo cual le da cierta independencia, pero su Junta Directiva es encabezada por el Secretario de Educación.

Y, ¿sabe usted?, José Ángel Córdova jamás presidió una reunión y Emilio Chuayffet ni siquiera se ha asomado.

Y 3.- el jueves 28 de febrero el Canal 22, a cargo de Raúl Cremoux, perdió la señal durante siete horas y media en horario matutino con la señal cedida por el Estado a ILCE.

¿Por qué?

Los técnicos argumentan malas adquisiciones hechas en el sexenio anterior (Play Out de la marca Fork).

El tema es vigente porque una de dos: o el gobierno de Enrique Peña hace grandes inversiones y mete orden en los canales del Estado, o seguirá ese desorden.

Y ante la nueva ley es necesario meter orden en casa, ¿no?

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